El alcalde de Oleiros firmó ayer el decreto para que los técnicos procedan el próximo lunes día 5 a retirar los cables de la luz de la fachada de los casas en ruinas situadas en la calle Francisca Herrera, casi frente a la Casa Consistorial, tras la demora de Gas Natural-Fenosa en realizar esta operación para poder demoler estos inmuebles. Después le pasará a la compañía la factura del gasto de retirada.

La parte trasera de las casas ya fue derribada hace tiempo pero respecto al a fachadas el Concello estaba a la espera desde el verano a que Fenosa sacase el cableado, para que no quedase colgando.

Sin embargo, a pesar de que la multinacional aseguró que estaba en conversaciones con el Ejecutivo para llegar a una solución, el regidor se cansó de esperar y optó por actuar ya debido a que recientemente cayó sobre la acera una ventana de una de las casas mientras que hay "otras dos ventanas ya descolgadas" y por lo tanto en una situación "peligrosísima" para conductores y viandantes según afirmó ayer Ángel García Seoane.

El primer edil oleirense indicó que después de que el lunes se retiren los cables ordenará que de forma inmediata se remate el derribo de los inmuebles. El propietario, tras el requerimiento del Concello, ya solicitó a Fenosa un presupuesto de lo que tendría que pagar para retirar el cableado y hacer la demolición y la contestación de la empresa fue que tendría que abonar 11.075 euros, cifra que el propio alcalde calificó de "juzgado de guardia", al suponer casi mil euros por cada metro de cable a retirar (son unos doce metros las dos fachadas).

García Seoane destacó que Gas Natural incumple la ley porque en zona urbana está obligada a soterrar los cables de la luz.