El PP de Cambre anunció ayer en rueda de prensa que "estudiará las vías oportunas" para que el Ejecutivo local "asuma responsabilidades" por la contratación de una empresa "con vínculos manifiestos con un grupo del gobierno", en alusión al PSOE. El portavoz popular, Manuel Rivas, afirma que el Ejecutivo adjudicó a dedo a esta empresa diversos contratos menores entre junio y diciembre de 2015 para arreglos en colegios, escuelas unitarias y centros sociales que rondaban, en total, los 30.000 euros.

El PP asegura que el alcalde, Óscar García Patiño, levantó los reparos suspensivos de Intervención y pagó las obras. Manuel Rivas denuncia que el Gobierno local no puso en conocimiento del pleno ni los informes de reparo ni los decretos de pago de las facturas.

El Gobierno local replicó ayer que se trata de una decena de trabajos menores contratados por el ya exedil de Servicios Sociales, Jesús Bao. Afirma que fueron precisamente uno de los motivos que llevaron a Unión por Cambre a exigir la salida de este concejal del Ejecutivo y matiza que solo se pagó parte, en concreto 17.000 de los 32.000 euros. Patiño sostiene que Intervención puso reparos por un fraccionamiento de contrato, pero que en ningún momento habló de ilegalidad, sino de irregularidades.

El alcalde afirma que los 17.000 euros pagados se corresponden con aquellos trabajos que los técnicos constataron que se habían realizado, por lo que el Concello debe abonar las facturas para no incurrir en un enriquecimiento injusto. La cuantía restante todavía está pendiente de que los técnicos emitan los informes preceptivos. "El mal hacer de un concejal no es óbice para que una empresa cobre por hacer un trabajo", replicó ayer Patiño a consulta de este medio. El alcalde afirma que estas facturas ya tuvieron su "coste político", en alusión a la salida de Bao, y lanza una advertencia al PP: "No estoy dispuesto a que me dé lecciones un edil investigado por presunta prevaricación y malversación de caudales públicos", en alusión a la causa abierta contra Manuel Rivas por el déficit contable del Brincadeira.

Más críticas populares

El PP denunció acusa también al alcalde de negarles el segundo turno de intervención al que tienen derecho en los plenos y de permitir que sus ahora socios del gobierno del BNG "empapelaran" el mobiliario urbano y bienes privados con carteles para anunciar su entrada en el Gobierno. Los conservadores afean al regidor que no aplicase a los nacionalistas la ordenanza de ornato público y el Ejecutivo replica que el BNG pidió disculpas y apela a la existencia de carteles electorales del PP que también incumplen la ordenanza.