La conselleira do Mar, Rosa Quintana, aseguró el miércoles que la pretensión de la UE de limitar el arrastre en aguas profundas por debajo de los 800 metros afectaría a 300 barcos gallegos que faenan en Gran Sol y el litoral cantábrico, a la vez que pondría "en juego" 165 millones, más del "35%" de los ingresos de la flota. Quintana contradijo así al secretario General de Pesca, Andrés Hermida, que afirmó el mes pasado que la prohibición tendrá un efecto "mínimo" en la actividad de buques españoles.