El servicio de Nefrología del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) es considerado por los médicos especialistas como uno de los mejores de España, según se desprende de una encuesta realizada a 280 facultativos españoles por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que le otorgan una puntuación de 7,1, solo por detrás de Hospital Universitario Doce de Octubre de Madrid y del Hospital Clínic de Barcelona, que obtienen un índice de reputación de 10,9 y 10,3, respectivamente, de en ese sondeo.

El servicio de Nefrología coruñés es la única área de especialización de la red hospitalaria gallega que figura destacada en la encuesta realizada a los médicos por la OCU, un sondeo que, por otro lado, sitúa al Hospital Clínic de Barcelona como el centro hospitalario mejor valorado por los médicos especialistas, seguido del Vall d'Hebron, también de la Ciudad Condal, y de La Paz, de Madrid.

El hospital Clínic fue valorado como el mejor centro en seis de las trece especialidades (Neurología, Aparato digestivo, Nefrología, Urología, Oncología, Endocrinología, Cardiología, Pediatría, Ginecología -sin tener en cuenta embarazos ni partos-, Oftalmología, Cirugía ortopédica-Traumatología, Otorrinolaringología y Neumología).

Por su parte, el Hospital Universitari Vall d'Hebron (Barcelona) y el Hospital Universitario de La Paz (Madrid) aparecen entre los diez mejores de España en todas las especialidades. Madrid y Barcelona tienen, por tanto, los hospitales con mayor reputación entre los especialistas, a mucha distancia del resto de localidades españolas.

De los 784 hospitales que había en toda España a la fecha de la encuesta, solo un 19% de ellos fueron citados por alguno de los médicos especialistas encuestados por la OCU.

Más transparencia

A raíz de estos resultados, la OCU considera que es necesaria una mayor transparencia respecto de los niveles de calidad de la asistencia sanitaria recibida en los hospitales.

La organización de consumidores y usuarios también espera que este estudio anime a las administraciones sanitarias a hacerlos públicos y a seguir apostando por una atención de calidad tanto en la sanidad pública como en la privada.