Todo paciente que vaya a ser sometido a una cirugía debe bañarse previamente, la zona donde se realice la incisión no debe ser depilada, y los antibióticos deben administrarse antes de la operación no después, según unas nuevas directrices para evitar infecciones en el quirófano publicadas ayer por la Organización Mundial de la Salud (OMS). La entidad basa los cambios en evidencias científicas.