Emilio Carrizosa es presidente de la Sociedad de Investigación Operativa que estos días celebra en Oviedo su XXXVII Congreso nacional. En la inauguración quedó patente el importante papel de la estadística y la investigación operativa en la sociedad actual.

-¿Para qué le sirve la estadística a un ciudadano de a pie?

-La estadística nos permite sacar conclusiones sobre los datos, sobre la realidad que estamos viviendo.

- ¿Y qué es la investigación operativa?

-Su objetivo es determinar cómo se asignan y distribuyen los recursos de una manera óptima, se encarga de la optimización de recursos.

- ¿Cómo han afectado las nuevas tecnologías a estas disciplinas?

-Han supuesto una revolución inmensa. En la actualidad se recogen y se trasmiten ingentes cantidades de datos. El ciudadano recibe esos datos ya filtrados de una manera u otra y los que toman decisiones lo hacen sobre esos datos.

-¿Qué tipo de decisiones?

-No me refiero solo al gestor político que debería conocer la opinión de sus ciudadanos, tampoco las empresas que van a lanzar un producto y querrían predecir la cogida que va a tener.

-¿Quién más utiliza esos datos?

-Se está desarrollando mucho la bioestadística. Se analizan los datos genéticos de análisis de marcadores tumorales para poder predecir si una persona está padeciendo un cáncer en una fase tan inicial que sería indetectable al ojo clínico de un especialista sino fuera porque se están utilizando datos estadísticos.

-¿Los ciberataques se pueden evitar con estadística?

-Los hay en todo el mundo y es necesario recoger información, procesarla y decidir si filtro o identifico como ataque una consulta a una página web.

-¿Algún ejemplo más?

-También se utiliza en cooperación y desarrollo. Un terremoto puede ser una gran desgracia pero luego hay que tomar decisiones, decidir si se mandan médicos, qué tipo de material sanitario tienen que llevar, y esas decisiones hay que tomarlas sobre datos. Afortunadamente, ahora los satélites y otras tecnologías portan mucha información pero tiene mucho ruido y es compleja, así que debe ser procesada.

-¿Procesar esos datos es cocinarlos?

-Lo de la cocina estadística de los datos en las encuestas es la respuesta científica a un problema. Los ciudadanos cuando nos entrevistan sobre cosas políticas decimos "a usted qué le importa" o mentimos descaradamente. A partir de la información que se tiene y partiendo de una serie de variables y de la realidad ya constatada, como que nadie me ha dicho que votó al partido x y ese partido ha sacado el 30 por ciento de los votos, hay que construir modelos en los que se utiliza esa información y esa falta de información para poder dar resultados. Es cierto que la cocina puede ser perversa para que salgan los resultados que yo quiero que salgan pero también un cuchillo lo puedes utilizar para cortar un cachopo o para cometer fechorías.

-Muchos de esos datos de los que habla se recogen de manera ilegal.

-Los estadísticos no participamos en el proceso de recogida de datos y entendemos que los que nos llegan han sido recogidos de forma ética y legal.

-En internet estamos ofreciendo datos constantemente.

-Es muy interesante el análisis de sentimientos a partir de las respuestas que todos hacemos en las redes sociales, de las que es posible inferir cosas muy llamativas e invisibles de la persona que lo está haciendo. Si tienes esa información sobre qué tipo de hoteles les tienes que vender o qué tipo de noticias les tengo que transmitir si quiero influir sobre el usuario.

-Da miedo.

-Es un tema muy peligroso y de enorme trascendencia en el que nosotros tenemos mucha responsabilidad. La sociedad tiene que protegerse pero esa protección no es decir que la estadística miente o denostar la cocina. Habitualmente no hay manipulación en la cocina. El resultado te puede gustar más o menos. Lo que hacemos es procesar una cantidad ingente de datos y convertirla en algo que entre en nuestra cabeza.

-¿Para así poder tomar decisiones?

-En la estadística está la base para tomar decisiones libres a la hora de votar, de prescribir un tratamiento médico o de que una organización envíe médicos a una catástrofe natural. La estadística nos ayuda a tener mejor calidad de vida, nos ayuda a salvar vidas.

-¿Cómo?

-En el ámbito sanitario, por ejemplo. Sin irnos de España, yo mismo participo en un proyecto en Sevilla con un laboratorio de diagnóstico de cáncer. Ellos miden muchas proteínas y sustancias en una muestra de sangre, pero no saben cuáles son los marcadores tumorales que desarrollarán un cáncer. La estadística ayuda a predecir qué marcadores desarrollarán esa enfermedad y atajarla.