Tras los dos accidentes mortales del año pasado, el Concello duplicará la noche de San Juan de este año el número de efectivos para velar por la seguridad de los ciudadanos y atender las emergencias. El concejal de Seguridad Ciudadana, Julio Flores, anunció ayer que en las playas y en los barrios de la ciudad habrá 179 personas vigilando el devenir de la celebración, frente a las 94 que había el año pasado. Además de policías, tanto nacionales como locales, y bomberos, también se repartirán por los arenales personal de Cruz Roja, Protección Civil y 061, así como 24 vigilantes de seguridad privada contratados por el Gobierno local.
La coincidencia en sábado de la noche más larga del año es la razón de que el Ayuntamiento haya incrementado las medidas de seguridad y de que impulse una campaña informativa entre los ciudadanos que consistirá en el reparto de folletos sobre los riesgos de las hogueras y el mar y en la colocación de panales con las mismas cuestiones a la entrada de las playas. Dentro de esta iniciativa, los bomberos han realizado un vídeo que se colgará en el portal web YouTube, se repartirá a través del correo electrónico y se visionará en colegios.
Flores pidió "prudencia y sentido común" a los coruñeses y les instó a abandonar las playas cuando comiencen a trabajar los servicios de limpieza. En Riazor, los operarios llegarán a las seis de la mañana y en Orzán a las ocho. A media tarde estarán listos ambos arenales, según la previsión municipal. Durante la noche, el Concello instalará dos hospitales de campaña y habrá ambulancias en los accesos a las playas para poder resolver cualquier incidencia que se produzca. La Policía Local cortará el tráfico en el paseo marítimo a las siete de la tarde del 23 de junio y se reforzarán varias líneas de autobús y la de bus búho para evitar colapsos de circulación.
