Más de la mitad de los abonados afectados por las obras de las cubiertas de Riazor ya han retirado sus entradas para los partidos contra Sporting de Gijón, este domingo, y Granada, el próximo lunes 24 de septiembre. En total son 8.564 socios, situados en las gradas de Marathón y Pabellón, los que deben cambiar de sitio. También por los trabajos, habrá siete puertas cerradas: 4, 5, 6, 7, 8, 21 y 22, por lo que el club recomienda acudir con tiempo a los accesos habilitados.

Una situación que, según el concejal de Deportes, José Manuel Sande, provoca una "mínima perturbación" en los seguidores del Deportivo. Los abonados, que han tenido que esperar largas colas para retirar las localidades, no opinan lo mismo. Muchos entienden que esta reubicación pretende garantizar la seguridad de los asistentes al estadio, pero lamentan que el club no haya facilitado las entradas de otra forma que no fuese presencial en las taquillas del Palacio de los Deportes.

El Concello informó hace unos días de que las obras de las cubiertas del estadio se prolongarán hasta final de mes. Un retraso que han criticado PP y BNG, calificando de "vergüenza" la gestión del Gobierno local. "Es una obra hecha en tiempo récord, la más importante de este mandato", respondió Sande, a quien le resulta "sorprendente" que partidos políticos "que no abordaron esta obra previamente" critiquen la actuación.

El concejal del área de Deportes explicó además que la reubicación de los abonados se lleva a cabo por "seguridad" y reveló que existe una "comisión de seguimiento", en la que trabajan Deportivo y Concello, para evaluar el desarrollo de las obras. "La reubicación se corresponde con una situación absolutamente coyuntural", agregó. Sande asegura que la actuación será "un logro por el cambio estético" que sufrirá el estadio.

Las nuevas cubiertas no será la única novedad en Riazor. El estadio también estrena este domingo césped e iluminación. El proyecto de luminarias, en el que el club ha invertido 1,7 millones, cuenta con 352 nuevos proyectores, 65 más que la temporada pasada. Una tecnología que permitirá, además, desarrollar shows lumínicos.

En el primer partido del Dépor en su casa, solo estarán activos 200 proyectores, ya que los demás se instalarán en las gradas de Marathón y Pabellón cuando finalicen las obras. Sin embargo, el Deportivo asegura que la iluminación para este domingo está garantizada. El nuevo sistema cuenta con un tiempo de reencendido en caso de avería de menos de un segundo, mientras que el anterior superaba los 15 minutos. El club también ha renovado el césped, dañado por las obras a pesar de que la empresa encargada de los trabajos, Arias Infraestructura, optó por no colocar la maquinaria sobre el campo, como se había previsto inicialmente. Fue una decisión para ahorrar tiempo, ya que si las enormes grúas hubieran operado en el terreno de juego, habría sido necesario esperar un mes a la recuperación de la hierba. Las máquinas de mayor tamaño se encuentran en el exterior del estadio, en la calle Manuel Murguía y la avenida de la Habana.