Las pintadas realizadas en bienes privados no pueden ser eliminadas por el Concello a través de la empresa encargada de la limpieza de la vía pública, Cespa. Su ámbito de actuación es municipal, por lo que limpiar muros, garajes, pavimentos o fachadas emborronadas de titularidad privada o de espacios públicos que no son del Ayuntamiento es responsabilidad de sus propietarios administrativos. El Gobierno local prepara en la actualidad una modificación en la ordenanza de limpieza que le permitirá en cambio intervenir en determinados bienes que, aunque sean privados, tienen especial interés histórico y patrimonial.

El alcalde, Xulio Ferreiro, avanzó ayer este cambio, que su Ejecutivo prevé llevar "pronto" al pleno para su aprobación. Los ámbitos en los que estarían localizados estos bienes privados objeto de pintadas vandálicas serían la Ciudad Vieja y las zonas del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri), explicó el regidor. "Iremos poco a poco solucionando este problema con el que nadie está a gusto", añadió.

Ferreiro comentó además que el nuevo contrato de limpieza viaria, sometido a consulta pública desde el pasado mes de julio, recoge la actuación de una brigada específica dedicada a limpiar grafitis no autorizados en fachadas y espacios públicos. "El asunto de las pintadas es una cuestión crónica de hace muchos años en la ciudad y siempre ha habido dificultades para actuar sobre los bienes privados afectados. No se trata de un problema sobre cuantía de sanciones, es un tema de civismo y de poder tener instrumentos para poder actuar sobre la limpieza", profundizó el alcalde.

La realización de grafitis y pintadas en la vía pública y en el mobiliario urbano o sobre muros, paredes de edificios, monumentos, estatuas y elementos de la ciudad está prohibida, según señala el artículo 74 de la ordenanza reguladora de limpieza viaria; se exceptúan los grafitis en lugares expresamente autorizados. La infracción de la norma en este aspecto está considerada como leve y se sanciona con una multa de hasta 750 euros. En los casos en los que algún mensaje o inscripción en estos lugares tenga carácter ofensivo o dañino Cespa puede proceder a la retirada urgente de la pintada a petición de los ciudadanos afectados o del Ayuntamiento.