Los padres de Diego Bello, el joven coruñés abatido por la policía filipina el pasado enero, se reunirán hoy con la Valedora do Pobo, María Dolores Fernández Galiño, para pedirle "ayuda" con el fin de que "se castigue" a los responsables de su "asesinato", del que se cumplen nueve meses, informa la Plataforma Xustiza para Diego.

Los padres del fallecido entregarán a Galiño el informe de la Comisión de Derechos Humanos de Filipinas, publicado el pasado mes de agosto, en el que se llega a la conclusión de que la policía "disparó deliberadamente a matar" al joven empresario y se rechaza que la actuación fuese en "legítima defensa". La Audiencia Nacional rechazó investigar el caso por considerar que no le compete.