La llegada al puerto coruñés de toda clase de buques hace que los prácticos reciban en numerosas ocasiones presentes de las compañías navieras en reconocimiento a la ayuda prestada para operar en la dársena. Este tipo de recuerdos son habituales cuando se trata de la primera visita de un barco a la ciudad, en especial por parte de los cruceros turísticos, que entregan a los prácticos reproducciones de sus buques a pequeña escala que estos profesionales conservan junto con otro tipo de regalos acumulados a lo largo de los años y que ahora exhiben en Twitter orgullosos de los “tesoros” que guardan en sus instalaciones.