La compatibilidad con la Risga, la supresión de los itinerarios de inclusión y la duración indefinida de la renta social municipal planteada para la reforma de esta prestación ayer mediante una moción en el pleno por Marea Atlántica, que defendía el aumento de su cuantía hasta los 765 euros y su duración hasta los 24 meses, hizo que los grupos del PSOE, PP se pronunciasen en contra, lo que hizo que fuese desestimada, ya que solo recibió el apoyo de la concejala no adscrita, Isabel Faraldo, mientras que los nacionalistas optaron por abstenerse porque, aunque creen que la renta social debe reformarse y ampliar su cuantía y duración, opinan que no es legalmente compatible con las pensiones no contributivas y que no deben eliminarse los itinerarios.

Marea, a través de Silvia Cameán, defendió esta iniciativa como parte del nuevo plan de choque municipal contra la pandemia y propuso que el importe de la renta social superase el umbral de la pobreza, situado en 765 euros en A Coruña, frente a los 564 que se conceden ahora de acuerdo con el Iprem. También planteó que la prestación se reciba durante 24 meses en lugar de los 18 actuales y que se pueda renovar al cabo de dos meses si se mantiene la situación de exclusión social, una de las cuestiones sobre las que se pronunció en contra la concejala de Benestar Social, Yoya Neira, quien también se posicionó en contra, al igual que BNG y PP, de la compatibilidad de la renta social con la Risga, las pensiones no contributivas o las ayudas de emergencia social, ya que las dos primeras no están permitidas por la legislación y de la tercera dijo que su función ya está cubierta por la propia renta social.

Neira también se manifestó contraria a simplificar los trámites para solicitarla mediante la autorización al Concello de la comprobación de los datos necesarios para eliminar consultas previas, ya que aseguró que se han introducido medidas para agilizar la tramitación.

Los tres grupos que no secundaron la moción expresaron su rechazo a la supresión del requisito de la participación de los beneficiarios en itinerarios de integración social y laboral. Marea propuso también complementar la renta social con las becas de comedor y con las pensiones no contributivas que no lleguen al importe mínimo de esta prestación para beneficiar a las personas mayores.