La Policía Local anuncia que tendrá a partir de este fin de semana una presencia más activa en la calle San Juan y su entorno, donde la acumulación de consumidores, especialmente las tardes y noches de los domingos, ha suscitado numerosas denuncias vecinales por comportamientos incívicos e incumplimiento de las recomendaciones de seguridad derivadas de la pandemia. El 092 movilizará agentes para situar en la zona un dispositivo de control sobre la actividad de los locales de hostelería de la calle y la actitud de sus clientes, algunos de los cuales, según las denuncias de los vecinos, no usan mascarilla cuando no respetan las distancias de seguridad y orinan en la vía pública.

Fuentes policiales admiten que la actitud de parte de las personas que se concentran en San Juan los fines de semana es recurrente y censurable. Matizan que hay hosteleros que son rigurosos con las normas y consejos sanitarios y cumplen los horarios de cierre, aunque otros no lo son. Las mismas fuentes reconocen que el 092 hace un seguimiento de la situación desde hace tiempo, incluso desde el mandato anterior, con documentación gráfica e informes, pero no siempre disponen de los medios ni efectivos adecuados para hacer un control más severo de la zona como para dispersar a las multitudes.

El domingo pasado, por ejemplo, la Policía Local solo tenía un coche patrulla disponible para desplazarse a la calle San Juan tras recibir nuevas denuncias vecinales, una dotación insuficiente ante los cientos de personas allí concentradas. La previsión policial para dentro de cinco días es contar con más personal e incluso reforzar su presencia con agentes del 091, dado que posibles infracciones que se cometen son de competencia nacional. Ante la aglomeración de consumidores en las aceras y la calzada de un mismo lugar sería necesaria la presencia de al menos una decena de policías.

Las fuentes consultadas advierten no obstante de la complejidad de erradicar concentraciones como las denunciadas en San Juan, donde mucha gente consume fuera de los espacios permitidos, como las terrazas, o llega a la calle tras haber consumido alcohol en otras zonas de la ciudad. Admiten que el problema difícilmente va a desaparecer dado que los que durante una época se reúnen en una calle para beber se desplazarán a otras cuando en ese lugar haya presencia policial para evitar actitudes desproporcionadas.

“Creemos que el Concello deja de lado este problema”

“Es un problema importante. Espero que la gente lo conozca y tome conciencia de que hay que invertir en los medios necesarios”, expresaba ayer un vecino de la calle San Juan. “Creemos sinceramente que las aglomeraciones frecuentes en la calle son noticia y un problema y que el Concello, la Policía Local e incluso la Nacional las están dejando de lado”, comentaba otro. Ambos prefieren no dar su identidad, pero han denunciado repetidas veces los problemas generados en la calle por exceso de gente, ocupación de la vía pública, distancias sin guardar, falta de uso de la mascarilla y vómitos y orines tanto en San Juan como en Fuente Seoane, junto al colegio Grande Obra. Los vecinos admiten que el problema “viene de años atrás”. La presidenta de la asociación vecinal recuerda que el Gobierno anterior, residentes y hosteleros se reunieron en su día para tratar de encontrar puntos de equilibrio. Pero el problema persiste. Ahora la Policía Local prevé reforzar la vigilancia en la zona.