Al menos ocho agentes de la Policía Local controlaron ayer a pie de calle y en coches patrulla la actividad hostelera en la calle San Juan y su entorno, donde la acumulación de denuncias vecinales los fines de semana —especialmente los domingos— por exceso de aforos, incumplimiento de horarios, consumo fuera de la superficie de las terrazas y concentraciones de personas sin mascarilla ni las debidas distancias de seguridad movilizó esta semana al 092. Los clientes volvieron a acudir a los locales de San Juan y San José —no todos abiertos ayer— pero lo hicieron en menos cantidad que otros domingos y sin ocupar la calzada.
Las primeras patrullas policiales se dejaron ver sobre las cinco de la tarde y pidieron la documentación a los responsables de algunos locales. Sobre las ocho volvieron a la zona, por la que circularon por las mismas calles para controlar la presencia de personas. Hasta ocho agentes también caminaron por la calle San Juan para comprobar la distancia entre personas y que los grupos de gente llevaban puesta la mascarilla mientras no consumían.
Los vehículos pudieron transitar sin dificultad por San Juan, por donde en ocasiones las tres líneas del bus urbano no ha podido circular debido a la acumulación de gente en la calzada y desvió su trayectoria entre la plaza de España y la calle Orillamar. Los buses 4, 6 y 6A sí pudieron cruzar ayer San Juan sin dificultades.
La Policía Local intervino el sábado por la noche en seis zonas públicos para disolver sendas concentraciones de personas; en algunas de ellas había gente bebiendo alcohol. Los agentes actuaron en la plaza de San Cristóbal (frente a la estación de ferrocarril), el parque de Santa Margarita y la plaza Juan Naya; también por presencia de grupos amplios de jóvenes en las calles Sol, Socorro y Orzán, donde separaron las aglomeraciones. Las intervenciones se enmarcaron en las medidas de seguridad vinculadas a la pandemia sanitaria, por lo que los policías impidieron la concentración de personas no convivientes en espacios públicos.
Además, el 092 actuó ante un grupo de jóvenes que golpeaba mobiliario público en el cruce de las calles Sol y Socorro. En el transcurso de la noche los policías levantaron un acta por desconsideración a los agentes de seguridad.
Los agentes de la Policía Local interceptaron el sábado por la noche al conductor de un patinete eléctrico que se dio a la fuga tras pedirle una dotación de Atestados en plena calle que se detuviera por circular en sentido contrario y con peligro para otros usuarios de la vía pública, por lo que podía incurrir en un delito contra la seguridad vial. El 092 actuó también anoche por un incidente con resultado de lesiones en la zona de las calles San Vicente y Noia, en el barrio de Os Mallos.
