Los nombres de Alfonso Molina, Barrié de la Maza, Peñamaría del Llano o Diego Delicado pueden tener los días contados en el callejero coruñés tras la redacción de un informe, encargado por el Concello y firmado por el Instituto José Cornide de Estudios Coruñeses, que pide la retirada de simbología franquista de las calles, además de los honores y conmemoraciones de quienes otrora se contaron entre las filas y afinidades del régimen.

El escrito propone una lista inicial de catorce nombres ampliamente fundamentada, que será analizada hoy por el Consello Municipal da Memoria Democrática. La alcaldesa, Inés Rey, informó entonces de que el documento sería analizado con “rigor histórico y legal”, lo que no aseguraba, dijo, que todos los cambios propuestos fuesen implementados. Desde el Instituto José Cornide aseguraron que existían, en el seno de la entidad, “opiniones divergentes” sobre las conclusiones recogidas.

Los argumentos para la elección de los nombres que integran la relación, elaborada por un grupo de trabajo constituido en 2019 e integrado por Ana Romero, Luis Lamela, Segundo Saavedra y Carmen Martín, están extensamente plasmados en el informe, y estriban en múltiples fuentes documentales, entre las que se cuentan archivos, artículos de prensa y libros de distintos autores. En total, fueron consultadas, para la redacción de la propuesta, un total de 46 referencias bibliográficas, artículos de prensa procedentes de doce medios de comunicación, entre los que se cuenta LA OPINIÓN, y documentos procedentes de once archivos, tales como el Archivo del Reino de Galicia, el Archivo Histórico Nacional o el de la Guerra Civil Española.

Debido al gran volumen de documentación a consultar, se contrató a una empresa especializada para la búsqueda de las fuentes necesarias para la fundamentación del escrito. El grupo entregó el informe al Concello en diciembre de 2020. Los propios autores aseguran, en sus prolegómenos, que el hecho de que las calles están dedicadas a personas individuales obligó a una investigación profunda alrededor de su implicación en la Guerra Civil y posterior represión. Los investigadores señalan que, debido esta circunstancia, el trabajo no fue “nada fácil” dadas las muchas fuentes susceptibles de ser analizadas. El documento concluye que, aunque algunas de estas figuras contribuyeron al desarrollo económico y urbanístico de la ciudad, pudieron estar implicados de igual modo en la represión franquista.