El consejo de administración de Adif ha aprobado la licitación del contrato de obras de ejecución del acceso ferroviario al puerto exterior de A Coruña, en Punta Langosteira, por un importe de 139,7 millones de euros, que será financiado con fondos Next Generation asignados a la Autoridad Portuaria de A Coruña, informa este miércoles en un comunicado. Este acceso ferroviario, del que se espera que contribuya a incrementar la competitividad en el puerto exterior, tendrá una longitud total de 6,7 kilómetros de longitud, de los que 5,3 discurren en túnel.

Contará con un diseño en vía única sin electrificar, sobre la que en una primera fase se montará vía con ancho ibérico (1.668 mm) posteriormente se adaptará al internacional (1.435 mm).

La obra surge por sucesivos acuerdos plasmados recientemente en un convenio entre el Ministerio de Transportes, Adif, Puertos del Estado y la Autoridad Portuaria de A Coruña.

El Ministerio ya adelantó el día 4 de este mes la previsión de que la obra, presupuestada en 157,1 millones, fuese licitada este mes por Adif. El Puerto de A Coruña deberá licitar por su parte las vías de los muelles. La conexión ferroviaria debe estar concluida en agosto de 2026.

EL CONVENIO

La firma, el pasado 4 de febrero, del convenio entre las administraciones implicadas en el proyecto de la conexión ferroviaria del puerto exterior de A Coruña es el penúltimo trámite que estaba pendiente antes de que las obras salieran a concurso. La actuación prevista, con sus 157,1 millones de euros de presupuesto, al margen del IVA, es una de las de mayor dimensión en Galicia en los últimos años.

La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, había anunciado el 21 de enero que la licitación del proyecto por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) se abriría en febrero y que la previsión es que las obras comiencen en septiembre. Al estar financiada en su totalidad por los fondos europeos Next Generation, cuyo destinatario es la Autoridad Portuaria de A Coruña, el plazo para ejecutar el proyecto concluirá en agosto de 2026, aunque la duración de los trabajos se calcula en 53 meses. Eso llevaría la entrada en servicio de la línea a comienzos de 2027, por lo que es previsible que en la licitación se prime una reducción sustancial del periodo estimado para construir el tendido ferroviario.  

La secretaria de Estado del Ministerio de Transportes, la gallega Isabel Pardo de Vera; la presidenta de Adif Alta Velocidad, María Luisa Domínguez; el presidente de Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez Dapena; y el presidente de la Autoridad Portuaria de A Coruña, Martín Fernández Prado, fueron los encargados de suscribir el convenio que hará posible la puesta en marcha de este ansiado proyecto.

El acuerdo establece las condiciones de financiación y desarrollo de la totalidad de esta iniciativa, así como las medidas correctoras del impacto ambiental sobre el terreno que fueron aprobadas en 2017 por la Secretaría de Estado de Medio Ambiente a través de la declaración de impacto ambiental, que fue prorrogada en agosto de 2021 al haber transcurrido los cuatro años durante los que tienen vigencia estos documentos.

Red interior

El convenio suscrito no incluye otras obras que también serán costeadas por los fondos Next Generation y que consisten en la construcción de la red ferroviaria interior de punta Langosteira, de forma que los convoyes con las mercancías puedan circular por sus muelles. Estos trabajos tienen un presupuesto de 14 millones de euros sin IVA y, a diferencia de la conexión con la red estatal, serán licitados por la propia Autoridad Portuaria.

El enlace entre el puerto exterior y la zona de Vío, donde conectará con la línea A Coruña-Santiago, tendrá una longitud de 6,7 kilómetros, de los que 5,3 serán a través de túneles. El proyecto establece que será una vía única sin electrificar, aunque podrá estarlo en el futuro, y tendrá ancho ibérico que se prevé que pase al internacional posteriormente. Adif trabaja al mismo tiempo en el diseño de un nuevo ramal que conectaría punta Langosteira con la línea A Coruña-Santiago en Uxes y que evitará que los trenes procedentes de la dársena exterior tengan que llegar a la primera ciudad para dirigirse hacia la segunda, con el consiguiente ahorro de tiempo que implicará.