El veto europeo a la pesca de fondo a más de 400 metros en decenas de caladeros europeos, entre ellos varios empleados por la flota coruñesa, empezó a aplicarse el pasado día 9. Según el presidente de la Lonja, Juan Carlos Corrás, “todavía es pronto” para saber con seguridad si se traducirá en una reducción de capturas, pero prevé que estas “vayan a menos” y que la disminución se concentre en siete especies en las que se usa esta técnica: la merluza, el rape, el gallo, la cigala, el besugo, la bertorella y la palometa roja. Entre todas sumaron el año pasado capturas por valor de cerca de 21 millones de euros, esto es, un 32,3% de la facturación total de 2021.
La merluza, que dejó en los muelles coruñeses cerca de 13 millones de euros durante 2021, fue la especie más importante económicamente ese año. Solo ella supuso algo más de un quinto del valor total de las descargas en el puerto coruñés. El valor conjunto del gallo descargado el año pasado fue de cerca de 2,6 millones (un 4% del total).
La cigala, aunque relativamente poco frecuente, alcanzó el precio por kilo más alto entre las principales especies, unos 14,3 euros, por lo que las descargas de la lonja del año pasado supusieron unos 2,5 millones (el 3,8% de la facturación). El rape sumó cerca de 1,8 millones de euros, y tanto la bertorella como el besugo se acercaron al medio millón. La palometa roja se trabajó poco, pero aún así sumó unos 130.000 euros.
Según explica Corrás, el veto europeo supondrá que parte de la flota —unos “sesenta o setenta” barcos en A Coruña, aunque no todos operan en el puerto todo el año— no podrán trabajar en sus caladeros habituales. “Tendrán que ir a sitios en los que trabajan otras artes, a otras pesquerías en las que creemos que las capturas serán bastante menores”, indica el presidente del mercado de pescado.
La reducción de las capturas de la flota gallega, en opinión de Corrás, también “facilitaría la entrada de productos de otros países” en el mercado. “En toda Europa entra muchísimo pescado de flotas asiáticas, africanas, sudamericanas, y de zona del Norte, como Noruega y las islas Feroe, que no están dentro de la UE”, indica Corrás, que cree que la medida “va a perjudicar a la soberanía alimentaria, a la industria en zonas costeras, va a ser un tremendo varapalo”.
La reducción de las toneladas pescadas, añade, perjudicará a la campaña de Navidad, que los armadores ya están preparando. Esto llevará a “menor disponibilidad” de las especies de fondo y “precios más altos para el consumidor”.
La base de datos de la Xunta no había subido este lunes los datos de capturas de la lonja de A Coruña durante las últimas jornadas, por lo que no se puede apreciar si el veto ha supuesto una reducción de capturas en el puerto. El presidente de la lonja indica que habrá que esperar a las “próximas semanas” para apreciarlo, pues “acaba de terminar la campaña del bonito”, y hay algunos barcos que están descansando o haciendo la transición a otras especies.
“Indefensión” del sector
Pero matiza que la propia implantación de la normativa también ha contribuido al parón. “Hay barcos que han demorado sus salidas, porque no estaba muy claro cómo se iba a aplicar, y han preferido esperar a ver cómo estaba en el asunto”, explica Corrás. La confusión, señala, proviene de dos fuentes. Por una parte, la Comisión Europea “se negó a dar las coordenadas en el sistema que ha utilizado en todas las normativas” y empleó uno “más complejo”. “Tuvimos que buscar conversores, y eso ha creado bastante dificultad” a la hora de establecer en qué zonas se prohíbe realizar pesca de fondo.
Por otra parte, finalmente la prohibición solo afecta a zonas con más de 400 metros de profundidad, con lo que la cantidad de áreas excluidas se ha reducido de las 87 originales a 46. “Pero tenemos algo de indefensión”, señala Corrás, porque es difícil determinar el relieve del fondo marino. “Aunque el reglamento diga que no se aplica en fondos inferiores a 400 metros, si se trazan líneas rectas entre dos puntos hay zonas en las que la profundidad es mayor y otras en la que no lo es”, explica.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció durante su reciente visita a A Coruña por la cumbre hispano-germana que España presentará un recurso contra el veto a la pesca de fondo, pero el ministro de Pesca, Luis Planas, señaló que hay “muy pocas posibilidades” de que haya una suspensión cautelar que impida su aplicación mientras se resuelve.
Corrás considera que el veto interpuesto por la Comisión Europea se ha establecido basándose “única y exclusivamente en un informe científico sesgado” . “Si se la permite actuar de esta manera, tendremos un grave problema”.
