El Puerto de A Coruña apunta a movilizar más mercancías y a afianzar proyectos en la red básica transeuropea

Ampliar el radio de acción de la actividad portuaria y movilizar más mercancías desde Langosteira. Reforzar los proyectos futuros y dar proyección a los planes vinculados a las energías renovables. Estas son las principales consecuencias que, en boca del Puerto de A Coruña y del sector empresarial de la ciudad y la provincia, tendrá la consolidación de la infraestructura coruñesa como la única considerada prioritaria dentro de Galicia en la Red Básica Transeuropea de Transporte (TEN-T), según el acuerdo alcanzado esta semana entre la Presidencia española de la Unión Europea, la Comisión Europea y el Europarlamento.

La UE reforzó el papel de Galicia en la Red Básica Europea de Transportes al integrarse en el Corredor Atlántico de mercancías y viajeros y contar en 2011 con los puertos de A Coruña y Vigo, que se convirtieron en nodos prioritarios de la política de transportes europea. Doce años después, con la dársena exterior más operativa, con gran parte de la actividad de Repsol en punta Langosteira y en pleno desarrollo de las obras de la conexión ferroviaria, solo el puerto coruñés refrenda su condición de prioritario, al defender la Comisión Europea que solo haya un puerto por región en la red básica.

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La Autoridad Portuaria concede al mantenimiento del puerto en la red básica transeuropea el valor de que permitirá “agilizar la ejecución y el desarrollo del Corredor Atlántico”, la red de infraestructuras primordiales que comunica toda la fachada oeste de Europa para potenciar el transporte de mercancías. Siempre con la finalización del tren a Langosteira en el horizonte, prevista para 2026, el Puerto estima que su condición prioritaria en la red de transporte servirá para “potenciar la influencia del puerto para que su tráfico de mercancías llegue más lejos, con la movilización de las mismas en mayores cantidades a sus habituales centros logísticos y a otros nuevos”, según apuntan fuentes portuarias.

La Confederación de Empresarios de La Coruña (CEC) entiende que la consideración del puerto coruñés como prioritario en la TEN-T es “un aval a los magníficos resultados del Puerto, que arroja excelentes balances en el tráfico de mercancías, liderando el crecimiento en el sistema portuario español”. La decisión, en opinión de Antonio Fontenla, presidente de la CEC, “reafirma que la conexión ferroviaria con el puerto exterior es una infraestructura clave y supone también un espaldarazo a los proyectos de futuro previstos en el puerto exterior dentro de la iniciativa A Coruña Green Port”, entre ellos los impulsados por Moncobra, del grupo Cobra, Candieira Offshore, de Saitec, Fisterra Energy, del fondo Blackstone, y Armonia Green Galicia, del Grupo Ignis. Para Fontenla, esta estrategia va a situar al puerto, a la ciudad y a la provincia, “como uno de los polos europeos de mayor proyección en el sector de las energías renovables y su cadena de valor, así como en los combustibles verdes”.

La UE refrenda el puerto de A Coruña como el único prioritario de Galicia en la red básica

La Cámara, en un juicio parecido al del la CEC, interpreta que el hecho de que el puerto se consolide en la red básica es “un reconocimiento de la bondad de la decisión de su construcción [de la dársena de Langosteira]”. “Los crecientes datos de tráfico, la elevada demanda empresarial para instalarse en sus terrenos y el efecto arrastre que genera en la economía de A Coruña y su área hacen de esta infraestructura un elemento clave en la economía del norte y el este de España, con una visión de servicio que abarca todo el noroeste peninsular, incluyendo parte de la meseta”, añade.

El acuerdo de la UE deja en cambio un mal sabor de boca en el sector empresarial respecto a las conexiones ferroviarias. Tras la última negociación se confirmó que el eje ferroviario A Coruña Ferrol y la línea de mercancías A Coruña-Lugo-Monforte siguen en la red global, “con un horizonte de desarrollo que podría demorarse hasta el 2050”. “Creemos que esta es la salida natural de las mercancías de nuestra provincia, y la conexión con Ferrol es esencial para configurar ese polo de referencia del noroeste gallego por el que están apostando las nuevas industrias. Desde la CEC vamos a seguir reclamando un horizonte temporal razonable para esta infraestructura, clave en la competitividad del tejido empresarial e industrial de A Coruña y de Galicia”, insiste Fontenla.

Red básica y red global

La red básica en la que se refrenda el puerto coruñés está compuesta de los elementos de la red global que tienen la máxima importancia estratégica para lograr los objetivos de la política de transporte de la UE y son objeto preferente de actuaciones con ayuda comunitaria. La red global es un concepto más amplio de la TEN-T formada por elementos considerados de interés común.

El presidente del Puerto de Vigo, Carlos Botana, defendió ayer que Galicia puede tener dos puertos en la red básica de corredores, y no solo el de A Coruña, tras haberse quedado en la red global. “Somos dos puertos distintos que no se hacen competencia. A Coruña es de graneles y Vigo de mercancía general, contenedores, coches y pesca”.

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