La victoria del BMC en la contrarreloj por equipos celebrada en la tercera etapa, de 24,5 kilómetros entre Roanne y Montagny, situó a uno de sus corredores, el australiano Rohan Dennis, como nuevo líder del Dauphiné (Francia), con el mismo tiempo que su compañero de filas el estadounidense Tejay van Garderen.

El BMC superó por cuatro segundos al Astana del italiano Vincenzo Nibali y en cinco al Movistar de Alejandro Valverde, que ahora ocupa el noveno puesto, a cinco segundos del nuevo líder y empatado con su compañero de filas Gorka Izagirre.

Hacía 35 años que no se disputaba una crono por equipos en el Dauphiné, desde la victoria del Miko-Mercier en 1980.

El recorrido de ayer era más plano que el que, dentro de un mes, tendrá la novena etapa del Tour de Francia, entre Vannes y Plumelec. Entre el punto de salida, a 150 metros de altitud, y el de llegada, a 483, había un desnivel ascendente de 333 metros.

Valverde, cerca de la cabeza

El Movistar de Alejandro Valverde, sexto en el orden de salida, llegó con el mínimo de cinco corredores a la meta con un tiempo de 30:03, tercero en ese momento y también al final, completando una brillante actuación.

En el control de etapa establecido en el kilómetro 14, el BMC tenía 17 segundos de ventaja sobre el Sky del líder, el británico Peter Kennaugh, y por tanto el australiano Rohan Dennis se situaba como el líder virtual de la carrera. El conjunto británico, que contaba con sólo cinco corredores a 10 kilómetros para llegar a la línea de meta, perdió otros 18 segundos en lo que faltaba y se dejó finalmente el liderato.

El británico Chris Froome, líder del Sky y uno de los favoritos para llevarse la victoria final en el próximo Tour de Francia, afrontará las etapas montañosas del Dauphiné con una desventaja de 35 segundos en la clasificación general con respecto al estadounidense Van Garderen, del BMC, y 30 con Alejandro Valverde, Gorka Izaguirre y Beñat Intxausti, todos del Movistar.