La tenista española Garbiñe Muguruza ha ganado el torneo de Pekín, de categoría Premier Mandatory y disputado en pista dura, tras conseguir la victoria en la final frente a Timea Bacsinszky en dos sets (7-5, 6-4) en una hora y 34 minutos, en un partido trabajado donde realizó una remontada meritoria en la primera manga.

En el primer set, la hispano-venezolana comenzó con un break rápido sobre su rival, por lo que todo hacía pensar que la exhibiría un gran tenis. Pero a partir de ese momento se vio que continúa con sus problemas al servicio, como se pudo ver también en las semifinales, y tardó ocho juegos en ganar un saque. Con 5-2 en el marcador, ese primer juego a favor de Garbiñe Muguruza al saque fue el punto de inflexión en esa primera manga. Desde ese momento anuló a la suiza, a la que no le permitió sumar ningún juego más, y se llevó el set por 7-5.

En el segundo parcial, la número cinco del mundo continuó con los problemas al saque, sobre todo al inicio, pero no se dejó ir en el marcador y con un juego más agresivo y restando muy bien consiguió que a Bacsinszky se le notara un tanto insegura, tanto que celebró el 3-2 como una victoria. Con este escenario, el encuentro fue igualado en el marcador hasta el 4-4, pero se notaba que la hispano-venezolana llegaba más entera a los juegos decisivos. Así, logró romper el saque de la suiza y, al contrario que durante todo el partido, se hizo fuerte en su saque, consiguió la victoria y se llevó el título.