El golf le dio ayer cuatro oros de una tacada a la delegación española en los Juegos Mediterráneos de Tarragona 2018; fue un pleno en la programación de este deporte que concluyó tras cuatro días de competición. El malagueño Mario Galiano, número uno del ranking europeo aficionado en 2014 y que hace dos años se hizo profesional, estuvo firme siempre para llevarse el oro. En féminas, la madrileña Marta Sanz también se colgó el oro. Y España también dominó las dos pruebas por equipos de la jornada.