Marc Márquez (Repsol Honda) se impuso ayer en la carrera de MotoGP del Gran Premio de Malasia, penúltima prueba del Mundial, después de presionar hasta el último momento al italiano Valentino Rossi (Yamaha), que lideraba la cita y que cometió un error cuando restaban cuatro vueltas para el final.

A falta de ocho giros para que concluyese la carrera en el circuito de Sepang, el de Cervera, que era segundo, cambió de ritmo para recortar el segundo que le separaba de Il Dottore. Su acoso surtió efecto y, en la curva 1 y a falta de cuatro vueltas, el transalpino cometió un fallo que sirvió en bandeja el triunfo al catalán.

Además, con su novena victoria del curso, Márquez, que refrendó su corona en Motegi, da también el título de constructores a Honda, que ya cuenta con 24 en la categoría reina. Todo tras una cita en la que tuvo que salir desde la séptima plaza para cumplir la sanción de seis posiciones por conducir de manera "irresponsable" durante la calificación del sábado.

Junto a él se subió al podio el también español Álex Rins (Suzuki), que completó una espectacular carrera en la que pudo remontar, y el francés Johann Zarco (Yamaha), que partió desde la pole tras la sanción del catalán. Mientras, el italiano Andrea Dovizioso (Ducati) pudo hacerse de manera matemática con el subcampeonato con su sexta posición.

Otros tres españoles concluyeron dentro del top 10: Maverick Viñales (Yamaha) fue cuarto, justo por delante de Dani Pedrosa (Repsol Honda), y Álvaro Bautista (Ducati) terminó séptimo. Además, Aleix Espargaró (Aprilia) concluyó undécimo y su hermano Pol (KTM) tuvo que abandonar. Tampoco terminó el sustituto de Jorge Lorenzo, el italiano Michelle Pirro.

Márquez reconoció después que durante la lucha por el triunfo con Valentino Rossi se le "pasó por la cabeza el incidente de 2015" en el mismo circuito, en el que el italiano le dio una patada y le tiró al suelo, y reconoció que cuando se cayó se sintió "más relajado".

"Cuando estaba pilotando, tengo que admitir que se me ha pasado por la cabeza el incidente de 2015. He apretado al máximo y he tenido dos sustos durante la carrera, pero he visto que me estaba acercando a Valentino. En la curva 1 ha cometido un error y lo he aprovechado. Hubiera sido bonito poder luchar hasta la última vuelta por la victoria. Cuando he visto que se caía, estaba más relajado", admitió.

Además, el de Cervera explicó sus intenciones en la penúltima prueba del campeonato. "Me he puesto rápido a un segundo. En la aceleración he consumido la goma trasera mucho al principio, entonces he parado ahí para no forzar demasiado. Después he cambiado el ritmo a falta de ocho vueltas. Me conocéis, el plan era intentar adelantar a Rossi. Quería llegar a la última vuelta y llegar con él. Cuando estas luchando en una batalla así, no quieres perder ni una décima", manifestó.

"Mi objetivo era luchar por la victoria. Sabía que en seco iba bien: pensaba en el triunfo. Poco a poco he ido adaptándome a la pista. Hoy ha sido una carrera extremadamente difícil: no teníamos la moto perfecta. He pilotado con el instinto. Estaba luchando conmigo mismo y peleándome con la moto para intentar cazar a Valentino", continuó. Por último, el catalán dio la enhorabuena al madrileño Jorge Martín (Honda) y al italiano Francesco Bagnaia (Kalex) por sus títulos de Moto3 y Moto2 conquistados en el trazado asiático. "Quiero felicitar a Jorge Martín y Pecco Bagnaia por sus Mundiales. Lo celebraremos juntos en Valencia", concluyó.