La decisión del Comité de Competición sobre el Barcelona-Deportivo Liceo se hace esperar. Una vez estudiadas las alegaciones del club coruñés, enviadas el pasado lunes, sobre por qué no pudo presentarse el domingo a jugar el partido en el Palau Blaugrana, el organismo presidido por Joan Garrido desea escuchar también a los azulgrana, a los que ayer remitió el escrito verdiblanco, por si quieren aportar o alegar algo. Aunque se había anunciado un fallo inminente para dar por zanjada la polémica o bien con una nueva fecha para el partido o bien dándole por perdido el encuentro al Liceo por incomparecencia, la intriga continuará unos días más.

La defensa del Liceo, preparada por sus servicios jurídicos, se centra en que su vuelo nunca llegó a ser cancelado, como sí los de la compañía Iberia. De hecho, explica, el equipo llega a embarcar y no sale porque el avión no puede aterrizar en Alvedro tras varios intentos. Después, dice, esperó por las varias opciones que había, más vuelos en el propio sábado „la víspera del partido, recuerda, como alegato a que no se la jugó a viajar en el mismo día„ tanto en A Coruña como en Santiago. Incluso les reubicaron y los mandaron a Lavacolla aunque finalmente fue imposible porque el avión tuvo que desviarse a Oporto. El Liceo también se justifica alegando que la Xunta avisó el viernes de la alerta roja por el temporal Fabien, un día antes de su viaje, lo que les dejó poco margen de reacción. Por último, la directiva recuerda que es la propia Federación Española de Patinaje la que en su página web anuncia que el Liceo no puede viajar por causas meteorológicas „de fuerza mayor, como exige el reglamento„ y que también el Barcelona en sus redes sociales reconoce que los coruñeses hicieron todo lo posible por llegar.