Garbiñe Muguruza se despidió ayer del Abierto de Australia, primer Grand Slam de la temporada, después de caer en los octavos de final ante la japonesa Naomi Osaka en tres sets (4-6, 6-4 y 7-5), en un duelo de casi dos horas donde desperdició dos bolas de partido al resto y saque para ganarlo.

El final de la aventura australiana de la finalista del 2020 fue amargo. Después de haber jugado a un gran nivel y de haber tenido el billete para los cuartos en su mano, fue víctima de los nervios y de la reacción de su rival, campeona en 2019.

La hispanovenezolana parecía tener el partido controlado cuando logró ponerse 5-3 arriba en la tercera y definitiva manga. Ni siquiera tuvo que esperar a su servicio porque se puso 15-40, pero no fue capaz de aprovechar esa gran oportunidad ante una tercera favorita que se rehizo a partir de ahí y le cerró el pase entre las ocho mejores sin dejarla hacer ningún juego más.

El primer duelo entre las dos ex número uno del mundo fue entretenido, con momentos de gran tenis y decidido por detalles, ya que sólo tres puntos separaron a la ganadora (93) de la perdedora (90). Osaka acabó con 40 golpes ganadores, 19 de ellos con su drive, un golpe, sobre todo el cruzado, con el que hizo mucho daño a una Muguruza, más imprecisa en el momento decisivo y que labró sus opciones gracias a su servicio (8 aces), principalmente cuando conectó primeros (79% de puntos ganados).

En el resto de la jornada, Novak Djokovic, número uno del mundo, avanzó a cuartos de final al superar al canadiense Milos Raonic (7-6 (4), 4-6, 6-1 y 6-4), y se citará con el alemán Alexander Zverev, mientras que el búlgaro Grigor Dimitrov dio la sorpresa al eliminar al austriaco Dominic Thiem (6-4, 6-4 y 6-0), número tres del ranking y finalista de 2020.

En el cuadro femenino, la número dos, la rumana Simona Halep, tuvo que remontar su encuentro ante la polaca Iga Swiatek (3-6, 6-1 y 6-4), vigente campeona de Roland Garros. En los cuartos le espera la estadounidense Serena Williams, que ya ha alzado el título en Melbourne en siete ocasiones. La norteamericana necesitó tres sets para eliminar a la bielorrusa Aryna Sabalenka por 6-4, 2-6 y 6-4).