El Manchester City allanó ayer su camino hacia los cuartos de final de la Liga de Campeones después de mantener su impecable racha en el Puskas Arena de Budapest, donde se impuso con mucha autoridad al Borussia Mönchengladbach alemán por 0-2.

El contador de triunfos citizen ya roza la veintena de victorias consecutivas. La decimonovena llegó en el retorno al asalto de la Champions con una actuación solvente y autoritaria, a la que le faltó seguramente una mayor recompensa en forma de goles.

Pese a que prescindió en su once titular de su gran generador de juego, el belga Kevin de Bruyne, el líder de la Premier demostró que su actual estado de forma está por encima de individuos, ayudado también porque su rival, más alicaído, estuvo demasiado temeroso y le costó un mundo salir de la presión a la que le sometieron continuamente los visitantes. Un tiro a puerta hizo el conjunto de la Bundesliga ante un City que evidenció una vez más su firmeza defensiva.

El conjunto inglés se adueñó del balón y gracias a ello siempre rondó las inmediaciones de la portería de Sommer con bastante peligro, aunque sólo una vez acertó a marcar. El partido rozaba la media hora cuando una buena internada de João Cancelo encontró sin marca y solo a un Bernardo Silva que cabeceó sin problemas el 0-1.El Gladbach no supo encajar este golpe, pero logró frenar las acometidas de su rival hasta el descanso. Un error de Bensaibini le dejó una gran opción a Gabriel Jesus para ampliar la distancia, pero el brasileño estuvo poco acertado y Elvedi llegó a tiempo para evitarlo. Sin embargo, la segunda que tuvo el 9 no la dejó pasar para hacer el 0-2. A partir de ahí el City continuó con su dominio, pero sin más goles.