El Viaxes Amarelle, acostumbrado en los últimos años a caer y levantarse, prepara con la máxima ilusión la nueva temporada tras el descenso a la Segunda División Nacional femenina de fútbol sala. El objetivo volverá a ser el ascenso a la máxima categoría, una meta que ya consiguió dos veces en los últimos cinco años. El equipo de Jorge Basanta enfoca todo el trabajo hacia el debut liguero, el 9 de octubre, en la cancha del Txantrea de Pamplona. Hacia esa cita están orientados todos los amistosos de preparación y también los encuentros oficiales de Copa Galicia, competición en la que el Amarelle debutó el pasado domingo con una goleada en el derbi ante el 5Coruña (10-1). Una vez superada la ronda previa, el siguiente rival será el todopoderoso Burela Pescados Rubén, que la pasada campaña conquistó todos los títulos por los que peleó, incluida la Liga y la Copa de la Reina.

“Siempre es atractivo y motivante acabar una semana de entrenamientos con un partido y, en esta ocasión, todavía con más alicientes por enfrentarnos a un equipo que lo ganó todo el año pasado”, relata Basanta de cara al encuentro del próximo sábado, a las 18.00 horas, en el pabellón de Sagrada Familia.

El técnico del Amarelle cumple su cuarta campaña al frente del conjunto coruñés en busca de un nuevo ascenso a la élite, como el que consiguió hace dos años. Una misión para la que no contará con Martita, Ana Escribano, Patri Corral, Tamara Gándara, Sofía Rodríguez ni Tana, bajas con respecto a la pasada temporada, pero a la que se suman Élia, Santiesteban y Carlita, esta última desde el filial. “Con lo que tenemos, intentamos sacar el máximo rendimiento”, garantiza Jorge Basanta.

Para lograr un impulso económico imprescindible para seguir creciendo, el Amarelle ha iniciado una campaña en busca de copatrocinadores que, desde 1.750 euros por temporada, pueden lucir su marca en las camisetas de las jugadoras.