Jacobo Garrido cerró el Campeonato del Mundo de natación adaptada con la medalla de bronce en el relevo de 4x100 libres junto a sus compañeros del equipo español. El coruñés no nadó la final, pero sí las eliminatorias de la mañana, por lo que también tuvo derecho a subir al podio y a recibir la presea junto al resto de sus compañeros, seis en total. Merecido premio para el exnadador del Liceo, ahora en el Mataró desde que entrena y vive en el CAR de Sant Cugat, que completó una gran semana de competición en Funchal (Madeira, Portugal).

El relevo español de 4x100 libres estuvo formado por Sarai Gascón Íñigo Llopis, Nahia Zudaire y Ariel Schrenck en la final mientras que por la mañana Jacobo Garrido y Nuria Marqués pusieron de su parte para clasificar al equipo para la tarde y que sus compañeros pudieran estar más descansados para la lucha por las medallas. Trabajo en equipo, por eso todos los integrantes tienen su premio, porque todos son importantes en el resultado final de la prueba.

Garrido sumó cinco participaciones individuales y cinco finales en la categoría S9. Destacó sobre todo en 200 estilos y en 400 libres, dos pruebas en las que batió el récord de España y en las que se quedó a las puertas del podio con la cuarta posición final. En 400, defendía el título mundial que había conseguido en Londres en 2019, pero se quedó fuera del podio, eso sí, con mejor marca que lo que había hecho hacía tres años para ser campeón e incluso por delante del que el pasado verano en Tokio se llevó el oro en los Juegos Paralímpicos, en los que el coruñés fue quinto. A estas dos pruebas añadió la séptima posición en 100 mariposa y las octavas de 100 libres y 100 espalda, con dos mejores marcas personales también por el camino. En dos semanas cerrará la temporada en el Campeonato de España.