Las consecuencias por la muerte el pasado 30 de noviembre del aficionado coruñés Francisco Javier Romero Taboada, Jimmy, en la pelea multitudinaria previa al partido entre el Atlético y el Deportivo en las cercanías del Vicente Calderón se siguen sucediendo en estos días para erradicar este tipo de actos en el fútbol español.

La Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte solicitará a todos los clubes de Primera y Segunda División sus respectivos Libros de Registro de Aficionados en el plazo máximo de diez días. Estos es, los principales equipos del país deberán tener identificados a sus seguidores para que exista una base de datos común entre los organismos y los clubs.

Además, Antiviolencia informó ayer de que la Liga de Fútbol Profesional (LFP) le ha entregado información "para acreditar las denuncias trasladadas en relación con los cánticos ofensivos e insultantes escuchados" en los partidos Madrid-Celta, Barcelona-Espanyol, Rayo-Sevilla, Deportivo-Málaga y Granada-Valencia.

La patronal del fútbol español también ha aportado la documentación en relación a una nueva denuncia en este sentido producida en el partido Osasuna-Valladolid, correspondiente a la decimoséptima jornada de Segunda División.

Igualmente, ha recibido por parte del Madrid, de cara a solicitar las correspondientes propuestas de sanción, "los datos de identificación de varios socios a los que el club expulsó tras proferir insultos muy graves" en el choque ante el Celta, además de copia de toda la documentación que envió a los 1.500 seguidores de la Grada Joven, "donde se les informaba de las conductas y actitudes prohibidas".

Antiviolencia indicó que enviará un escrito al Celta para recordarle que las sanciones propuestas a aquellos aficionados por introducir bebidas alcohólicas en el campo "están tipificadas en la ley y en ningún caso proceden medidas de gracia, tal y como han hecho público los responsables del club a través de los medios de comunicación".

El organismo, tras conocer por los medios de comunicación que el Sabadell procedió a la expulsión de dos socios por saludos nazis en el partido ante el Leganés del pasado domingo, solicitará al club catalán que aporte "tanto la identificación de dichos socios como las pruebas que le han llevado a tomar esta decisión, para abrir los procedimientos sancionadores pertinentes" contra ellos.

Finalmente la Comisión Antiviolencia acordó declarar de alto riesgo los partidos Rayo Vallecano-Espanyol, correspondiente a la decimosexta jornada de liga de Primera División; y Mirandés-Zaragoza, correspondiente a la decimoctava jornada de Segunda, además de "reservar opinión respecto de otros hasta recibir información adicional de movimiento de aficiones".

Esta medida llega después de las normas establecidas por la Liga de Fútbol Profesional para evitar que en los estadios se escuchen insultos hacia los jugadores, el árbitro o los aficionados rivales. Los cánticos contrarios a estas directrices ya han derivado en las primeras sanciones hacia los equipos en las pasadas jornadas.