Después de dos descensos, un par de temporadas en Segunda y el angustioso curso pasado, el buen arranque del Deportivo hace que la afición blanquiazul viva en este inicio de temporada una ilusión renovada en torno al equipo. Los buenos resultados hacen que, a pesar de que visite Riazor uno de los grandes del campeonato como el Sevilla, el aficionado afronte con esperanza cada choque, no como hace unos meses, cuando la cercanía del descenso arrastraba hacia el pesimismo. Gran parte de la culpa es de Víctor y de sus pupilos, que sobre el campo no defraudan a una afición entregada. Además, antes del inicio se guardó un minuto de silencio en honor a Jimmy y al socio que murió de un infarto durante el choque ante el Celta en el estadio coruñés.

El aficionado deportivista atraviesa un momento en el que su estado de ánimo está por las nubes y eso se palpa en el ambiente. Ir a Riazor ya no se toma como una visita al matadero, sino como una oportunidad para disfrutar con los futbolistas blanquiazules. La buena marcha en la clasificación también se deja notar en un repunte en el número de personas que acuden al estadio. Ayer, ante todo un Sevilla de Champions, el estadio vivió una de las mejores entradas en lo que va de campeonato.

A esta buena noticia se unió que ayer visitó Riazor el cuadro hispalense y con él su afición, con la que existe una profunda relación de amistad y cordialidad. Tanto el viernes como ayer al mediodía se pudo ver a seguidores sevillistas con bufandas y camisetas de su equipo caminando y comiendo por A Coruña. Esto se incrementó con el paso de las horas y ya con el partido muy cercano, un amplio grupo de seguidores de ambos conjuntos se unieron en los locales de hostelería de la calle Manuel Murguía y otras próximas para compartir cánticos y bebidas. Ya en Riazor, los sevillistas llenaron la esquina reservada a la hinchada rival entre Pabellón y Preferencia Superior y no dejaron de animar desde que ocuparon sus asientos. Su momento cumbre fue cuando entonaron "Vigo no", gesto aplaudido por resto del estadio.

Ayer además fue un día especial por otro motivo, y es que la cercanía con el primer aniversario del asesinato de Francisco Javier Romero Taboada (el pasado lunes), hizo que la asociación Jimmy Sempre con Nós organizase un torneo de fútbol indoor en A Grela y un concierto en la explanada de la Torre de Hércules, ambos como homenaje al coruñés. Además, su figura no pasó desapercibida desde los prolegómenos del partido y durante el minuto de silencio en su recuerdo se desplegó un tifo con su imagen y se repartieron banderitas con el lema Jimmy Vive en Maratón Inferior, en lo que fue una nueva petición de justicia para el hincha muerto. También durante el encuentro se escucharon consignas solicitando que su asesinato no quede impune.