Diego Caballo se ejercitó ayer durante una parte del entrenamiento sin la máscara protectora que luce desde la semana pasada como consecuencuia de la fractura de los huesos de la nariz que sufrió en el partido contra el Oviedo, en el estreno de la Liga en Riazor.

El lateral zurdo llegó a concluir el encuentro de la primera jornada, a pesar de su dolencia, pero en el segundo, cuando el Deportivo visitó al Huesca, siguió el partido desde el banquillo, ya que Anquela optó por Luis Ruiz. Ahora, con respecto a esta tarcera jornada, con la visita de los blanquiazules a Vallecas, el salmantino volverá a ser de la partida, aunque todavía está por desvelar si recuperará su sitio en el lateral o Anquela lo utilizará en una posición más avanzada, como refuerzo en el centro del campo. Hoy será la última prueba del equipo blanquiazul y también cuando se conocerá la lista de desplazados, así como el posible once que se medirá al Rayo Vallecano.