Al Deportivo, tan acostumbrado como estaba a digerir en su etapa más reciente los disgustos y las decepciones, le toca ahora gestionar la ilusión. El equipo ha arrancado la temporada casi de manera inmejorable, con pleno de victorias, nueve goles a favor y ninguno en contra. Las sensaciones, además, acompañan al grupo de Borja Jiménez, que ha conseguido armar un conjunto en este inicio con diferentes registros y en el que la práctica totalidad de la plantilla ha tenido su cuota de protagonismo.

En tres jornadas, el Deportivo ha presentado su candidatura y esta tarde (19.00 horas) deberá confirmarla ante otro de los equipos llamados a estar en la zona alta de la clasificación. El Badajoz se presenta en Riazor también como invicto y sin haber encajado todavía, dispuesto a mantener su buena dinámica del comienzo de la temporada.

El Deportivo regresará a su estadio, en el que deberá cimentar sus opciones de alcanzar el objetivo final aprovechándose de un escenario que sorprende incluso a los propios jugadores blanquiazules. La atmósfera en Riazor en la jornada inaugural contra el Celta B recordó a la de antes de la pandemia y esta tarde el aforo permitido por las autoridades sanitarias será incluso mayor. Todos los abonados del club, actualmente más de 16.000, tienen un asiento garantizado en el estadio si lo desean para el primer duelo directo de la temporada.

Está por ver de qué modo afronta el Deportivo el compromiso ante un rival atrevido y que también prefiere llevar la iniciativa. El equipo de Borja Jiménez se ha distinguido por su capacidad de adaptarse a diferentes circunstancias, especialmente en los compromisos más recientes a domicilio ante Tudelano y Calahorra, pero esta tarde probablemente deba asumir un papel más protagonista.

Borja Jiménez ha encontrado una alineación continuista, en la que ha ido introduciendo contadas modificaciones. Las alternativas parten desde el banquillo durante el encuentro según las necesidades, pero el once inicial ha sido muy parecido en las tres primeras jornadas. Hoy no podrá contar con Jaime Sánchez, lesionado, así que deberá escoger entre Trigueros o Granero para acompañar a Lapeña. La duda en el centro del campo está entre Villares y Rafa de Vicente, porque los delanteros son inamovibles. Quiles y Miku forman una pareja de garantías y entre los dos suman cuatro tantos.

Enfrente estará un Badajoz que se ha sabido sobreponer a los problemas institucionales que ha atravesado durante el verano para mantenerse como candidato al ascenso final.