Deportivo

Hablan los excapitanes del Dépor: "un vacío grande" por llenar sin Álex

Manuel Pablo, Laure, Domínguez, Aranzubia, Riki y Dani Giménez, que compartieron con el coruñés el brazalete de capitán, analizan el impacto de su retirada en el vestuario

Laure, Álex, Juan Domínguez y Manuel Pablo

Laure, Álex, Juan Domínguez y Manuel Pablo / Víctor Echave

“Ejemplar”. Es la palabra más utilizada por otros excapitanes del Deportivo para referirse al gran capitán, Álex Bergantiños, con quien compartieron el brazalete en los últimos años.

Empezando por otro grande, también leyenda, Manuel Pablo, que ensalza a Álex como “alguien que siempre ha defendido al deportivismo”, al tiempo que reconoce que “va a quedar un vacío” por su adiós al fútbol profesional, tanto en el vestuario como de cara a la afición. “Una figura así es difícil de sustituir”, coincide Juan Domínguez.

“Cuando este tipo de jugadores deciden dejarlo y acabar su carrera, está claro que dejan un vacío muy grande que ahora mismo no sé quién será el encargado de ocupar”, razona el exguardameta Dani Aranzubia, que durante su etapa en Riazor llegó a compartir capitanía con Manuel Pablo, Juan Domínguez, Laure y el propio Álex.

“Va a ser difícil llenar ese hueco —advierte Laure, también recién retirado del fútbol— porque los valores de honradez, trabajo y saber estar que transmite son muy complicados en el mundo actual”.

Sabias reflexiones de algunos de los deportivistas que, junto a Álex, lideraron el vestuario en las últimas décadas. Como Riki, otro de los artífices del ascenso de 2012 y que también portó el brazalete blanquiazul: “Álex ha sabido llevar muy bien las riendas y siempre ha sido muy querido dentro y fuera del vestuario”.

Más reciente fue la etapa en el Deportivo de Dani Giménez, otro de los que lideraron el grupo en los últimos años. “La palabra que mejor lo define es ejemplar”, resume el exportero gallego, a punto de iniciar una nueva etapa en los banquillos al frente del Parla Escuela madrileño. “Sin hacer mucho ruido, se hacía respetar en el vestuario. Solo hablaba cuando había algo importante que decir y nunca con una frase más alta que la otra, salvo en los momentos en los que consideraba que no era adecuado lo que estaba pasando. Ahí sí levantaba la voz y se imponía”, recuerda Dani. Su retirada del fútbol profesional supone, a su juicio, “un vacío también de cara a la afición”.

La figura de Álex estaba “muy arraigada después de tantos años en el club y la afición tenía ese referente”, apunta Manuel Pablo. Ahora el de la Sagrada Familia seguirá ayudando desde el consejo. “La gente le reconoce el deportivismo que siempre ha mostrado y su compromiso con el club. Siempre ha mostrado un sacrificio ejemplar, tanto dentro como fuera”, añade el grancanario. Domínguez resalta también sus cualidades deportivas y humanas: “Siempre se caracterizó por ser muy buen profesional y muy buen compañero”.

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