Idiakez receta ilusión y unidad para el Dépor

El nuevo entrenador del Deportivo aterriza con un mensaje de confianza en la cantera y concienciado con el reto que afronta - “Soy consciente de la presión, pero es una presión muy bonita”, afirma

Fernando Soriano e Imanol Idiakez, ayer en la presentación del técnico en Riazor. |  // CARLOS PARDELLAS

Fernando Soriano e Imanol Idiakez, ayer en la presentación del técnico en Riazor. | // CARLOS PARDELLAS / M. Otero

Marcos Otero

Marcos Otero

Imanol Idiakez (San Sebastián, 1972) ya ejerce como nuevo entrenador del Deportivo. Concienciado por el reto que afronta en un club que por cuarta temporada consecutiva militará fuera del fútbol profesional, el técnico blanquiazul aterrizó con un mensaje de confianza en la cantera, ilusión y un llamamiento a la unidad del deportivismo en un contexto de preocupación por las recientes decisiones que ha adoptado el máximo accionista, Abanca. Acompañado del director deportivo, Fernando Soriano, avanzó parte de su idea futbolística y prefirió no profundizar demasiado en la composición de una plantilla que regresará al trabajo la semana que viene. Su idea es conocerlos a todos antes de tomar decisiones sobre un proyecto que para él empieza con “ilusión”. “Estoy como loco por empezar y devolver al Dépor al lugar que merece”, afirmó el nuevo inquilino del banquillo blanquiazul.

Presión y exigencia.

Idiakez asume que llega al banquillo de un club en el que se le exigirán resultados, pero al mismo tiempo seguro de sus posibilidades. “Soy consciente de a dónde vengo y de la magnitud del club. Estamos hablando de uno de los mejores clubes de España y soy consciente de lo que eso conlleva, pero vengo lleno de ilusión para poner mi granito de arena”, garantizó. “Soy consciente de la presión, pero es una presión muy bonita. Cómo no va a haber presión en un equipo al que vienen a ver 25.000 personas”, añadió.

El objetivo del ascenso y un mensaje de optimismo.

El regreso al fútbol profesional será la meta irrenunciable por cuarta temporada consecutiva después de tres asaltos frustrados. Idiakez tampoco esquivó que será lo que se le exija, aunque no se quiso pronunciar sobre la posibilidad de que el ascenso directo sea obligatorio. “Lleváis aquí toda la vida y hace poco se jugaba en Europa... Soy un poco maniático y supersticioso y no hace falta decir cuál es el objetivo”, manifestó. “Si lo conseguimos primeros es la hostia, pero tampoco nos vamos a tirar de los pelos si lo conseguimos de cuartos. Vamos a iniciar la cuarta temporada aquí y soy consciente de que una parte de nuestra gente está apenada por lo que ha pasado hace un mes. Vengo con la intención de que entre todos podamos recuperar la sonrisa, disfrutar del camino construyendo el equipo, disfrutar con lo que hace en el campo y ver crecer a la cantera”, enumeró sobre sus objetivos más allá del ascenso.

Llamamiento a la unidad.

Idiakez aterriza en el club en un momento delicado, con parte de la afición inquieta por los acontecimientos recientes y las decisiones que ha tomado el máximo accionista, Abanca. El nuevo entrenador tampoco se mostró ajeno a esa situación y la preocupación de la masa social, por eso lanzó un mensaje de unidad. “Lo que más me preocupa a mí es que estemos unidos, que esto lo saque adelante el deportivismo junto. Todos somos partícipes de esto”, razonó.

La cantera.

El papel de los jugadores formados en las categorías inferiores es un clásico en las comparecencias de los nuevos entrenadores deportivistas y probablemente lo siga siendo a lo largo de la temporada. Lo que ocurre es que la cantera debe ser uno de los ejes del club, según el máximo accionista. “Soy un enamorado de la cantera, vengo de cantera, mi hermano salió de cantera, a mí una lesión grave me impidió progresar. Creo firmemente en eso y es uno de nuestros alicientes. Cuando un club trabaja la cantera como el Dépor, cuando tiene ese trabajo de base bien hecho, uno no puede más que aprovecharse y sentirse afortunado de recoger el trabajo de tanta gente. Es un privilegio ver crecer jugadores a tu lado que llevan tiempo aquí”, proclamó.

El equilibrio entre las oportunidades a los canteranos y la obligación de ascender.

El club, sin embargo, se volverá a encontrar con la difícil tarea de que sus jóvenes valores den el salto al primer equipo en medio de un contexto de alta exigencia. “Todos somos un poco ventajistas y poner chicos jóvenes a veces tiene un precio que hay que pagar. Pero si no los pones, tampoco crecen. Tenemos que ser capaces de jugar con la experiencia y dejar sitio para que los jóvenes puedan desarrollarse. Es una habilidad que debemos tener”, reflexionó Idiakez. “Estamos concienciados de que la cantera tiene que ser importante por presente y futuro. Y no sólo porque lo queramos nosotros, porque lo pide el deportivismo, la propiedad y todo el mundo. Además, tenemos una cantera muy buena. Pero hay que saber poner el punto en competir y ganar partidos. Porque al final, si vengo, pongo muchos chicos y estamos cuatro partidos sin ganar, me dirán que no los ponga. A ver si somos capaces de encontrar el balance entre rendimiento, porque hay que salir de Primera Federación lo antes posible, y dar oportunidades”, razonó.

El Dépor que quiere Idiakez.

Al nuevo entrenador del equipo le acompaña una reputación de técnico con predilección por el juego combinativo y posicional. Buscará por encima de todo que su equipo sea protagonista y que los aficionados se sientan “orgullosos” sin cerrarse a un estilo. “Lo importante es que tenga ese sentimiento de la afición, de club, de pertenencia. A partir de ahí, como entrenador tengo que intentar que el equipo transmita una serie de conceptos, pero sobre todo que el equipo defienda la camiseta. Que la gente que venga a Riazor y que nos vea fuera se sienta orgullosa. Quiero un equipo que vaya a buscar las cosas, no que esperen a que sucedan”, afirmó.

El papel de Lucas Pérez.

Con la retirada de Álex Bergantiños, Lucas Pérez se convertirá en la principal referencia del vestuario junto a Ian Mackay. Además será el líder deportivo. “Le doy un papel importantísimo. Un jugador que ha dejado la Primera División para venir al Dépor, con un talento indudable, gol en toda su expresión y que va a ser fundamental. Tengo muchas ganas de verle, de que podamos charlar y de saber cómo ha vivido estos meses”, manifestó Idiakez.

La llamada de Fernando Soriano.

Idiakez fue la elección del club para el puesto de entrenador luego de la destitución de Rubén de la Barrera. Fue una propuesta del nuevo director deportivo, Fernando Soriano, junto a otros candidatos y por la que se terminaría decantando la cúpula deportivista. “Me llamó hace unas semanas y todo fue bastante rápido. Cuando a uno lo llama el Dépor... Hay oportunidades que no se dejan pasar. Contacto rápido, relación fluida, enseguida encontramos sintonía en lo que ambos veíamos en el proyecto y ha sido bastante sencillo”, indicó sobre las negociaciones.

La sombra de Rubén de la Barrera.

El entrenador guipuzcoano aterriza en el Deportivo después de otra destitución traumática de Rubén de la Barrera, considerado por la afición como el entrenador ideal para el club. Con ello tendrá que convivir Idiakez en este inicio de temporada. “Puedo decir con orgullo que tengo buena relación con Rubén”, afirmó. “Compartimos un montón de cosas, tenemos pasado en el Guijuelo los dos y una sensibilidad parecida por el juego. No tengo dudas de la capacidad de Rubén como entrenador, su trabajo y de los anteriores técnicos también me facilita a mí el trabajo”, destacó.

Mario Gibanel será su ayudante

Imanol Idiakez estará acompañado en el Deportivo por el exfutbolista Mario Gibanel, que trabajó con él en etapas anteriores y fue su ayudante en Zaragoza, Leganés y durante su experiencia en el fútbol chipriota. El club, según indicó el nuevo entrenador blanquiazul, está cerrando los detalles para la incorporación de un preparador físico luego de la salida de Luis Fandiño rumbo al Racing de Ferrol. En la estructura técnica de la primera plantilla, sin embargo, seguirán varios de los ayudantes que en las dos últimas temporadas ya formaron parte de los cuerpos técnicos tanto de Borja Jiménez como de Óscar Cano. Alberto Casal seguirá como entrenador de porteros, mientras que Álex Canosa continuará ejerciendo como readaptador. Sergio Roca también se mantendrá en la estructura del primer equipo a la espera de definir al preparador físico que trabajará con la plantilla a partir de la semana que viene en la vuelta a los entrenamientos.