El Deportivo, entre dos y cuatro fichajes en el mercado de invierno

Busca un delantero y un extremo diestro, a los que pretende añadir un lateral izquierdo y un jugador por dentro

Tiene copadas las fichas sénior, pero si inscribe a un sub 23 de la cantera, liberará una plaza extra

Iván Barbero persigue una pelota por Riazor antes de su lesión. |  // CASTELEIRO/ROLLER AGENCIA

Iván Barbero persigue una pelota por Riazor antes de su lesión. | // CASTELEIRO/ROLLER AGENCIA

Carlos Miranda

Carlos Miranda

Hace un año el Dépor fichó en el mercado de invierno a Lucas Pérez, Lebedenko, Saverio, Pepe Sánchez y Arturo y al final de este mes de enero de 2024 puede que no se quede muy lejos. El equipo coruñés se lanza a remozar su plantilla tras unos primeros meses de la temporada lejos de las expectativas suscitadas en verano y se mueve en su búsqueda en una horquilla de entre dos y cuatro fichajes. El delantero y el extremo diestro son innegociables y busca un lateral izquierdo por la incierta situación de Retuerta y un jugador por dentro (mediapunta o mediocentro ofensivo) ante la eventual salida de un jugador en esa zona del campo. Habrá trabajo para la dirección deportiva y los ejecutivos del club, porque el Dépor tiene ahora mismo agotadas las fichas sénior, con lo que los movimientos de llegadas vendrán precedidos casi seguro de salidas. Será un puzle que precisa de un laborioso encaje.

“Tenemos la oportunidad y los recursos para impulsar y reforzar al equipo en el mercado de invierno”, apuntaba tras la junta del presidente Álvaro García Diéguez. La necesidad más perentoria es la llegada de un delantero. La idea inicial es que sea un ariete con un perfil parecido a Iván Barbero, que domine el área, justo lo que ha echado de menos el equipo para traducir en goles el más que estimable caudal ofensivo de los blanquiazules en la mayoría de los partidos. Aun así, el Deportivo está sujeto al mercado y todo estará marcado por lo que acabe encontrando. El perfil puede variar si encuentra una opción que le convenza por encima del resto. Se busca en Segunda, Primera RFEF o en el extranjero, los caladeros naturales de los coruñeses.

La banda derecha es otro de los puntos a reforzar. Davo, más cómodo por el centro o por la izquierda, lleva meses jugando fuera de sitio y desde el banquillo ha salido en los últimos partidos David Mella. No es tampoco el lugar donde más suelto se encuentre, a pesar de que fue decisivo partiendo desde esa zona en la jugada del 1-2 al Arenteiro. Cayarga era uno de los jugadores llamados a ser alternativa en esa demarcación y no ha respondido. Es el gran candidato a liberar una de las fichas sénior que tanto necesita el Deportivo para hacer sitio a los refuerzos.

Con su hipotética salida y la inscripción de uno de los sub 23 de la cantera como jugador del primer equipo (el de más opciones es Mella), el club ya liberaría las dos fichas que necesita para el delantero y el extremo. El resto de movimientos, que se consideran necesarios, están condicionados por la manera de hacerles hueco y por el perfil de jugadores que les ofrezca el mercado.

El tiempo de baja de Alberto Retuerta es de, al menos, tres meses y el Deportivo quiere sentirse resguardado en esa posición. Iano Simao, zurdo de 24 años del Fabril, es una opción real para esa demarcación, pero juega en su contra la escasez de fichas sénior que tiene el Deportivo en estos momentos y las complicaciones que puede encontrar para liberarlas. Al club coruñés no le quedará más remedio que rastrear, antes que nada, el mercado de futbolistas sub 23 en todas las posiciones y, según discurra la ventana de pases, la figura del lateral de Guinea-Bissau ganará o perderá enteros. Retuerta acaba su contrato con el Dépor en junio y su baja irá más allá del cierre del mercado, dos variables que también son importantes en la ecuación.

La llegada de un futbolista por dentro, preferentemente un mediapunta, es una necesidad en la actual configuración de la plantilla del Dépor. Davo también puede jugar en esa demarcación, pero esa posición se ha quedado huérfana porque Idiakez se ha entregado a los pivotes, porque Hugo Rama o Pablo Valcarce no han respondido a las expectativas y porque Lucas ejerce muchas veces ese rol de 10 al bajar desde la zona del 9. Pablo Muñoz, que también podía haber ayudado, ha estado de baja gran parte de este inicio de temporada tras llegar en los últimos días del mercado de verano.

Ese cuarto fichaje solo llegará tras la salida de un futbolista importante y no resultará sencillo, pero el club ve que puede mejorar también en esa zona a partir de lo que encuentre en el mercado. Tiene trabajo, aunque todo con el asterisco de que algún jugador pida salir, con lo que aumentará la carga y el número de contrataciones. Habrá un mes de enero movido en la plaza de Pontevedra, como casi siempre en los últimos años.

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