Coren impulsa la compra de castaña para sus cerdos Selecta en una año de cosecha escasa

El Grupo Coren, la primera cooperativa cárnica de España. prepara la compra de castaña destinada a la alimentación de los cerdos de su Gama Selecta, en un año en el que los resultados de la cosecha no acompañaron. La recogida de este año no ha sido buena debido a la situación climatológica de las semanas previas a la recolección, pues aunque inicialmente la cosecha se preveía buena, el calor intenso de septiembre y hasta mediados de octubre provocó la pérdida de una gran cantidad de fruto.

En todo caso, la cooperativa que tiene ya 60 años de trabajo y esfuerzo impulsa la búsqueda de castaña para la alimentación de los cerdos, con el objetivo de repetir el volumen de compra de años anteriores. Por esta situación, Coren hace un llamamiento a la recogida de toda la castaña, ya que mucha queda abandonada en los montes sin recoger, y también a la profesionalización en el sector, con el cuidado de los soutos gallegos y la plantación de variedades de óptimo rendimiento. De hecho, los estudios del sector indican que la rentabilidad de una plantación cuidada y con variedades de valor añadido es similar a la de una hectárea de viñedo.

La profesionalización permitiría paliar el impacto de situaciones como la vivida esta temporada, además de potenciar un sector con buenas perspectivas de crecimiento en los próximos años.

Desde el lanzamiento de su Gama Selecta, Coren es uno de los mayores demandantes de castaña en Galicia. La cooperativa la adquiere cada año en temporada, que luego pasa por un proceso de pelado, cocción y posterior congelado, lo que permite su conservación con el fin de destinar a la alimentación de los cerdos durante todo el año siguiente.

El importante volumen de demanda de Coren desde hace ya más de una década, según destaca el grupo en un comunicado emitido ayer, desempeña un papel estabilizador en el sector, contribuyendo a la generación de riqueza y la dinamización económica del rural, al complementar los ingresos de las familias del campo, además de preservar los soutos frente al riesgo de desaparición que sufren por el abandono, lo que tiene también una importante repercusión medioambiental.

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