Luz verde al Plan de Impulso Democrático que el presidente gallego avanzó el pasado martes en el pleno extraordinario sobre corrupción. El Consello impulsa así las cinco nuevas leyes -entre ellas, el veto a las donaciones de empresas a partidos- y las 50 medidas extraordinarias que el líder del Ejecutivo se comprometió a tramitar en 50 días, y con las que pretende favorecer la transparencia y el buen hacer en la gestión pública.

A este paquete legal se suma además la reasignación de recursos internos para mejorar el control de las subvenciones públicas, si bien Feijóo no alcanzó a cifrar cuántos de los funcionarios se verán afectados por esta medida.

Por otro lado, y ya en el plano político, el líder del PPdeG mandó sendos mensajes a Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía, y a Artur Mas, al recordarles que ningún presidente de comunidad puede hacer lo que le dé la gana y lo que convenga a su partido al margen de los ciudadanos.