Los alcaldes del BNG salieron ayer a través de un manifiesto a respaldar a los regidores catalanes que "defienden la democracia y las urnas contra viento y en marea" y están dispuestos a que el 1 de octubre en sus municipios los ciudadanos puedan votar en el referéndum sobre la independencia de Cataluña. "Están dando una lección de dignidad, de compromiso, de estar al servicio de su pueblo", aseveran los regidores del Bloque.

Los alcaldes nacionalistas piden a sus homólogos catalanes que resistan y "no se amedrenten ante las amenazas de la Fiscalía". Para los dirigentes del BNG, en Cataluña, "se está discutiendo algo más que el derecho a decidir de Cataluña, se discuten los derechos y libertades de todos nosotros". En el manifiesto, el BNG manifiesta su intención de "conquistar un nuevo marco institucional que garantice la plena capacidad de decidir" de los gallegos.

El Bloque no es el único partido en Galicia a favor de la celebración del referéndum. El jueves Anova respaldó la convocatoria, denunció "un franquismo sin Franco" y avanzó que organizará actos y manifestaciones a favor de que los catalanes decidan su futuro. Al respecto, se pronunció ayer el delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, quien a preguntas de los periodistas, aseguró que como en todos los casos, "las manifestaciones o reuniones que se convoquen en contra de la legalidad no serán autorizadas". "Habrá que ver en cada momento qué tipo de convocatoria y comunicación se formaliza", añadió Villanueva. "La ley está para ser cumplida. Todos tenemos que cumplirla", remarcó el delegado del Gobierno.

Ayer mismo se suspendió en Vitoria un acto de la CUP, pues un juez admitió el recurso presentado por la Delegación del Gobierno en el País Vasco, que había pedido que se adoptase una "medida cautelarísima" para suspender la cesión por parte del Ayuntamiento de Vitoria de dicho local municipal para "un acto de campaña electoral de promoción del referéndum" del 1 de octubre. El auto recuerda que el Tribunal Constitucional ordenó "impedir o paralizar cualquier iniciativa que suponga ignorar o eludir" la suspensión de esa consulta independentista como a su juicio ocurre con la charla la diputada de la CUP.

El portavoz nacional de Anova, Antón Sánchez, tras conocer las declaraciones de Villanueva, le acusó de actuar de "censor" e insistió en la necesidad de promover actos "en defensa de la democracia" y del referéndum. Para el parlamentario, las palabras del delegado del Gobierno "confirman" la denuncia realizada por Anova en los últimos días. "Estamos en un estado de excepción no declarado", aseveró. "¿Desde cuándo se suspendieron los derechos fundamentales de libertad de expresión y de reunión en este país para que ustedes preventivamente actúen de censores e inquisidores contra quien opine políticamente sobre un asunto que a todos nos compete?", preguntó.