El pacto que alcanzaron el lunes, tras cinco horas de reunión, Navantia, la patronal de las compañías auxiliares en la ría de Ferrol y los sindicatos, a instancias del Consello Galego de Relacións Laborais, quedó en nada. Los trabajadores de las auxiliares decidieron mantener la huelga indefinida que ayer cumplió su sexto día y no aceptar, por tanto, las propuestas de la mesa del sector naval de suspender el paro para abrir un proceso de negociación.

En el caso de Fene, la decisión de mantener las movilizaciones fue ratificada por unanimidad, mientras que en Ferrol la votación estuvo más igualada, al apoyar 131 trabajadores (56%) que se continuasen con los paros por los 99 votos de los trabajadores partidarios de poner fin a la huelga.

Ayer fue el primer día que los 2.200 empleados de Navantia entraron en los talleres desde que arrancaron los paros el pasado jueves. En las dos asambleas de los operarios de las auxiliares se llegó al acuerdo de que "los trabajadores de la empresa principal podrán entrar a trabajar de manera libre", explicó el secretario comarcal de CIG-Industria, Vicente Vidal, al no estar estos recogidos en la convocatoria de huelga.

Los paros solo afectarán a los trabajadores de las auxiliares, que, matizó, mantendrán los piquetes en las puertas de la empresa pública para "controlar la entrada de los trabajadores de las compañías".

El acuerdo del lunes entre Navantia, patronal de las auxiliares y sindicatos, constataba el compromiso de la CIG, único sindicato convocante de los paros, de suspender la huelga indefinida si lo decidía la asamblea de trabajadores, algo que no ocurrió, y que las partes se daban a partir de entonces un plazo de algo más de un mes, hasta el 13 de noviembre, para lograr un pacto. En caso de "no lograrse" antes de esta fecha "se solicitaría la mediación" del Acuerdo Interprofesional Gallego sobre Procedimientos Extrajudiciales para la Solución de Conflictos Colectivos de Trabajo (AGA), a través de Consello Galego de Relacións Laborais, "dando un plazo de una semana al proceso de mediación para contribuir al acuerdo".

Además, la parte empresarial se había comprometido a que "estos acuerdos de contenido económico a los que se llegase en esta mesa tendrían efectos retroactivos desde la firma del Convenio de Siderometal de la provincia de A Coruña". Sin embargo, el rechazo de los trabajadores al acuerdo mantiene la huelga indefinida.