El miembro de la coordinadora de En Marea Gonzalo Rodríguez acusó ayer a los críticos con la dirección del partido de "sobreactuar" cuando abandonaran la reunión del consello das mareas que el viernes abordó la situación de Paula Quinteiro, la diputada inscrita en Podemos que se vio envuelta en un altercado con la Policía Local de Santiago en la madrugada del pasado 18 de marzo.

Gonzalo Rodríguez, que fue el encargado de informar a los medios sobre la resolución de la dirección de En Marea que pide a Quinteiro que renuncie a su acta de diputada, fue entrevistado ayer en RNE que, en sustitución del portavoz de En Marea, Luís Villares.

El miembro de la coordinadora negó que la reunión del viernes fuese "un juicio político" y tachó de "sobreactuación" la marcha del grupo de críticos. "Hubo alguien que se levantó y renunció a debatir sobreactuando. No es el momento para sobreactuar", lamentó.

En cuanto a Paula Quinteiro, que esgrimió su credencial de diputada cuando la Policía Local intentaba identificar a una persona por supuesto vandalismo, Gonzalo Rodríguez insistió en que la "gente normal no tiene esos privilegios". "La condición de diputado es un ejercicio para ejercer una acción política, no un acto privado", censuró.

Futuro

En esta línea, recordó que la Policía Local de Santiago "es la misma que realizó la denuncia" contra el edil popular en Compostela Ángel Espadas que fue sorprendido ebrio en su coche tras quedarse dormido al volante en un semáforo, lo que, en palabras de Rodríguez, fue "en su momento un acto relevante e incluso valiente" por parte de las fuerzas del orden.

Ante esta situación, Rodríguez considera que "hay compañeros" en el seno de En Marea "en mejores condiciones de desarrollar el programa político" de la organización que Quinteiro, cuya continuidad en el grupo parlamentario, según el miembro de la coordinadora, "puede condicionar y limitar" la acción del partido en la Cámara gallega.