La demanda de empresas que realizan trabajos forestales en Galicia, entre ellos de desbroce de fincas y talas, se ha disparado en las últimas semanas, a escasos días de que, el próximo jueves, termine el plazo para que estén limpias las denominadas franjas de seguridad de 50 metros en torno a núcleos urbanos y edificaciones aisladas franjas de seguridad.

Varios responsables de pequeñas empresas consultadas por Europa Press dan cuenta de este crecimiento de la demanda, que en algunos casos es de más del doble que la recibida por estas fechas el año pasado, y que todos atribuyen a la obligación legal y a una mayor "concienciación" de particulares y comunidades de montes ante la prevención de incendios forestales. Otras compañías detectan solo un "murmullo" y un aumento de las solicitudes de presupuesto, pero no tanto una mayor concreción en la ejecución de desbroces y talas.

Comunidades de montes, particulares y encargados de compañías de trabajos forestales denuncian "una confusión tremenda" y, como ya advirtió el presidente de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), Alfredo García, la semana pasada, ven "imposible" tener lista toda esta labor, cuando expira el plazo.

La limpieza de fincas es una tarea que en Galicia asumen los propietarios o que, en todo caso, se computa como economía sumergida al pagar el dueño a un conocido o al recurrir a anuncios que es fácil encontrar, en portales de internet. Esta realidad la conocen los que están al frente de empresas de trabajos forestales, como Javier Couto, encargado de Desbroces Lamas, en Vedra (A Coruña), quien asegura que su compañía se encuentra "al 200%" y la elevada demanda de rozas es "imposible de atender". En su caso, contrató a tres empleados más y la plantilla asciende a 11 personas. "No tengo más porque no encontramos gente", afirma. Calcula que el aumento del volumen de negocio respecto a 2017 ha sido de un 80%. "Empezó hace un mes pero la gente esperó al último día y ahora que empezaron a llegar las notificaciones se preocupa", explica. El precio por limpiar una finca oscila entre los ocho y los 10 céntimos por metro cuadrado y depende del tamaño, la vegetación y la posibilidad de acceder a ella con maquinaria. José Antonio Rivas responsable de una pequeña empresa agroforestal de Ourense está "desbordado" y lleva un mes "notando más demanda" de corta de pinos y de desbroce.

Por otra parte, la Consellería do Medio Rural anunció que iniciará esta semana las reuniones de estudio y control de las 77 zonas de Galicia que mayor índice de actividad incendiaria presentan. El objetivo, según la Xunta, es controlar "sobre el terreno" las "causas, consecuencias y peculiaridades" de los incendios en cada parroquia con más actividad incendiaria.