La decisión del ministro de Fomento, José Luis Ábalos, de revisar los plazos del AVE ha desatado en Galicia el temor a una nueva demora en la conclusión de una infraestructura que ya ha sufrido varios aplazamientos. "Vamos a ver los plazos, porque más allá de largos o cortos, lo importante es no generar falsas expectativas", argumentó ayer el responsable de Fomento. Según explicó en el Congreso, lo fundamental es la puerta en servicio de las líneas y no el final de la obra. "Y, a veces, se habla de fin de obra como si uno se fuera ya a subir al tren", aclaró.

En el caso del AVE gallego el anterior Gobierno había comprometido que las obras estarían terminadas en el último trimestre de 2019 para luego iniciar las pruebas y que a lo largo de 2020 se abriese a la circulación de viajeros.

Y ante la inquietud generada, el ministro de Fomento dejó claro que no piensa "paralizar ni demorar nada". "Tengan la confianza de que, con carácter general, el cambio de Gobierno no afectará a los compromisos de inversión ni a los contratos", señaló. Y, como muestra, adelantó que el Consejo de Ministros de esta semana aprobará una inversión de 190 millones en contratos de obras ferroviarias. En concreto, citó inyección económica de 78 millones para la conexión de la alta velocidad ferroviaria de Galicia con la Meseta. El secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, advirtió, en todo caso, de que si hubiese un retraso en los plazos del AVE gallego sería por la "herencia" del Gobierno del PP. El calendario fijado por el anterior Ejecutivo no concuerda, de hecho, con el cronograma del último contrato publicado en el Boletín Oficial del Estado para la ejecución de la alta velocidad gallega y que demoraría hasta marzo de 2020 la conclusión de las obras.

Para la conselleira de Infraestruturas de la Xunta, Ethel Vázquez, sin embargo, el AVE es "una realidad imparable". Argumenta que las obras están ejecutados en un 80%. Según dice, los tramos de mayor envergadura están "ejecutados, en ejecución o en fase de contratación" e incluidos en los Presupuestos del Estado que "avalan que se pueda seguir avanzando".

Por esta razón, la conselleira advirtió, en respuesta a la auditoría de plazos anunciada por Ábalos, que "no hay ninguna otra alternativa que no sea que el AVE llegue en pruebas a Galicia en los plazos marcados por el anterior Gobierno, a finales de 2019. Vázquez censuró además que el Gobierno central se reúna antes con la oposición gallega que con la Xunta. "No parece razonable", se quejó.

La conselleira también se refirió al informe del Tribunal de Cuentas de la UE que denunció los sobrecostes de varias líneas de alta velocidad en España, entre ellas el Eje Atlántico que discurre entre A Coruña y Vigo, y en el que, según el informe europeo, los trenes circulan además solo a la mitad de la velocidad para la que fue diseñada la línea.

Ethel Vázquez defendió la "incuestionable eficacia" del Eje Atlántico y tildó de "fundamental" la conexión entre Ourense y Santiago para garantizar "la cohesión social, la vertebración del territorio y la igualdad de oportunidades".

Y, en relación a los sobrecostes, advirtió que "no se pueden planificar infraestructuras con la calculadora en la mano".