A partir de enero habrá nuevas señales en las carreteras secundarias de todo el país, las más peligrosas por su elevada accidentalidad. El 90% de las colisiones, salidas de vía o atropellos mortales que se producen en la red viaria gallega ocurren en este tipo de vías, casi 15 puntos por encima de la tasa de accidentalidad registrada en el conjunto del país. Con el objetivo de reducir los accidentes de tráfico en torno a un 10% en la red convencional, el Consejo de Ministros prevé aprobar hoy el real decreto por el que se rebajará de 100 a 90 km/h el límite de velocidad para turismos y motocicletas en estas vías, que en Galicia suman más de 2.000 kilómetros. Mientras, camiones y furgonetas no podrán sobrepasar los 80 km/h. Y para los autocares que dispongan de cinturones de seguridad en sus asientos, la limitación será a 90 km/h.

Una vez aprobado el nuevo cuadro de velocidades para la red secundaria, una reducción que afectará en España a unos 7.000 kilómetros, los titulares de estas vías dispondrán de 30 días para aplicarla, según avanzó ayer el director de Tráfico, Pere Navarro, adaptando todas las señales existentes mediante pegatinas, tal y como se hizo cuando en 2011 se redujo temporalmente la velocidad en autopistas y autovías a 110 km/h. Esta reforma en los límites de velocidad en la red secundaria era una asignatura pendiente de la legislatura pasada en la que ya había empezado a trabajar el Gobierno del PP, con un borrador que fijaba el límite genérico en 90 km/h, con tramos a 70 (vías convencionales estrechas con marca longitudinal de separación en ambos sentidos) y también a 50 (en los tramos donde esta marca no estuviera pintada).

Alcance

En Galicia, la red viaria del Estado ronda los 2.400 kilómetros y algo más de 1.400 corresponden a carreteras convencionales de doble sentido, con un límite máximo genérico máximo de 100 km/h, De carreteras autonómicas, dependientes de la Xunta, se calcula que Galicia cuenta con unos 400 kilómetros que tienen limitada la velocidad a 100 km/h por ser de doble sentido y tener arcén de 1,5 metros. Estos dos tipos de verías serán en las que a partir del próximo mes de enero se impondrá la limitación a 90 km/h.

España es hasta ahora uno de los seis únicos países europeos que mantiene el límite a 100 kilómetros por hora en las carreteras convencionales junto con Rumanía, Polonia, Irlanda y Austria. A 90 km/h como límite máximo están Bélgica, Croacia, Grecia, Italia y Portugal. Mientras que en Suiza, Noruega, Países Bajos, Malta, Francia, Finlandia o Dinamarca está fijado a 80 km/h.

En la comunidad gallega, la velocidad es un factor concurrente en el 30% de los accidentes. No pisar el acelerador por encima de lo que marca la señalización evitaría uno de cada tres muertos y la rebaja en las convencionales a 90 km/h permitirá reducir la accidentalidad mortal en torno a un 10%, según las previsiones de la DGT. En los primeros once meses del año, más de 30.000 conductores gallegos fueron sancionados con la retirada de entre dos y seis puntos del carné por no respetar los límites de velocidad.

El director de Tráfico hizo balance ayer de las estadísticas en las carreteras secundarias del país, que en 2017 sumaron más de 1.000 víctimas mortales. "El 36% de los accidentes se produjeron por salir de la vía. El 28% son choques frontales, pero no en una recta sino en una curva: ocupas el carril contrario al girar y en ese momento pasa otro vehículo. Es una velocidad inadecuada o excesiva la que está detrás de estos siniestros", destacó Pere Navarro ayer en declaraciones a los medios durante un acto en Barcelona.

La rebaja del límite de velocidad en las carreteras secundarias estaba en la agenda del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska y del director de Tráfico para poner en marcha en 2019 junto con otros cambios con el objetivo de reducir la siniestralidad viaria. A partir del próximo año también se penalizará más el uso del móvil al volante (seis puntos menos frente a los tres que se retiran en la actualidad) y viajar sin cinturón de seguridad o con un menor sin silla de retención (cuatro créditos menos, uno más que ahora).