Desde mediados del año pasado y tras seis ejercicios a la baja, el mercado registra un aumento de demandantes de vivienda protegida en la ciudad de A Coruña. El repunte fue el 18%, el segundo porcentaje más alto entre las siete ciudades después del alcanzado por Vigo, con un 19,3%.

El aumento del precio de los alquileres y mejoras en la actividad económica son factores a los que alude el sector inmobiliario para explicar por qué vuelven a atraer los pisos de protección, pese a la insuficiente oferta de este tipo de viviendas que tiene Galicia en general. Solo hace un año y medio la demanda de estos pisos en la ciudad experimentaba un descenso del 45% con respecto a cuatro años antes, 2012, cuando el Rexistro recibía más de 4.100 peticiones. Otra de las razones que alientan el mercado es el decreto que prepara la Xunta para ampliar un 20% el límite de ingresos para acceder a un piso de protección, de manera que un demandante que esté por debajo de los 22.557 euros anuales tendrá más facilidades de alquilar o comprar una vivienda, frente a los 18.797 euros de límite hasta ahora.