Un día después de que el Tribunal Supremo avalara el fallo del TSXG de que cometió "desvío de poder" para colocar a la hermana del portavoz del PP gallego, Milagros Otero puso ayer su cargo a "disposición de la Cámara autonómica". A las 13.26 del mediodía entregó en el registro del Parlamento la misiva en la que anunciaba su renuncia, pero comunicaba que no se marchará hasta que los grupos parlamentarios pacten el nombre de su relevo, una decisión que ha disgustado a la oposición. El PP por su parte recibió con alivio una dimisión, que ya aguardaba desde el día anterior. El presidente de la Cámara, Miguel Santalices, consideró "sensato" que Otero permanezca en el cargo mientras no se designa su sucesor, para que no haya "un vacío".

Ahora los grupos parlamentarios deberán acordar el nombre de su sustituto. El PP necesita al menos el apoyo de uno de los tres partidos de la oposición para el nombramiento, pues se requiere el voto de 45 diputados, y los populares son 41. La promoción de Otero fue consensuada en su día con el PSdeG.

Milagros Otero vinculó además su salida con la del valedor adjunto, al instar, en su carta de renuncia, a los partidos a buscar sustitutos para ella, pero también para Pablo Comeselle. Precisamente Comeselle, propuesto para el cargo por el PSOE, fue sobre quien descarga responsabilidades Otero. ¿Por qué? La todavía Valedora defendió que se desvinculó del nombramiento de la hermana de Pedro Puy y también sobrina de Manuel Fraga como jefa de servicio de la institución por ser ella discípula académica del padre de María Puy, y que fue Comeselle quien resolvió el proceso, si bien se apartó una vez definidos los criterios de la convocatoria y de que se presentasen los candidatos.

Después de esperar un día por la renuncia de Milagros Otero, y con su silencio indicar a la Valedora el camino a seguir tras el fallo del Supremo, el PP despidió a Otero, elogiando su "magnífico trabajo", sobre todo por "acercar la institución a la ciudadanía, incluso en el mundo rural", afirmó la viceportavoz del PP gallego, Paula Prado. Por su parte, el titular de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, valoró que el paso atrás de Otero le "honra", sobre todo porque, precisó, ella "no firmó" la designación de María Puy como jefa de servicio y sin citar a Comeselle le conminó a "poner su cargo a disposición de la Cámara".

Feijóo aprovechó para comparar la decisión de la Valedora para veladamente criticar a Abel Caballero y Carmela Silva. "Hay una forma distinta de actuar en las instituciones de la comunidad de la de otros concellos, donde se puede contratar a familiares y no pasa absolutamente nada", dijo Feijóo, en alusión a la condena a un funcionario de este municipio por la contratación de la cuñada de la teniente de alcalde y presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva.

El portavoz de En Marea, Luís Villares, consideró que es una dimisión que "llega tarde y mal" y deja al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, "señalado" hasta que no le diga "claramente" a Otero que tiene que dimitir "inmediatamente".

Igualmente, la portavoz de Justicia del grupo Socialista en la Cámara legislativa gallega, Patricia Vilán, conminó a la hasta ahora titular del alto comisionado en Galicia a "que deje de representar" a la institución y se limite a "labores de gestión". La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, exigió el cese "inmediato" al entender que no es aceptable una "dimisión en diferido".