El festivo nacional del día 15 y el posterior puente de cuatro días provocará multitud de desplazamientos de corto recorrido por carreteras convencionales. Para controlar el correcto cumplimiento de los límites de velocidad, una de las principales causas de accidentalidad en Galicia, y reducir el número de catástrofes al volante, la Dirección General de Tráfico (DGT) puso ayer en marcha una nueva campaña de control de velocidad que se extenderá hasta el día 18 de este mes.

En la comunidad gallega todos los accidentes mortales del verano se produjeron en vías secundarias y se cobraron la vida de seis personas, cinco menos que las 11 del pasado año. Con el foco puesto en la Operación Salida del 15 de agosto, el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, anunció la pasada semana la iniciativa de Tráfico que se llevará a cabo en las carreteras convencionales de todo el país. Y es que el pasado año en este tipo de autovías se produjo el 75% de los siniestros mortales al volante en España y la velocidad destaca como la segunda causa de la siniestralidad, por delante del alcohol y tan solo superada por las distracciones de los conductores. Un 38% fueron salidas de vía y el 27% colisiones frontales. Los controles se practicarán, además de en los puntos de mayor riesgo, en tramos en los que se circula habitualmente por encima de los límites marcados o con un alto porcentaje de accidentalidad. Además, los conductores estarán advertidos de la existencia de controles a través de los paneles de mensaje variable o con señalización vertical circunstancial, cuando la vía no disponga de dichos paneles.

"El objetivo es facilitar la circulación y velar por la seguridad, por lo que la por lo que la DGT desplegará todos los medios a su alcance", explicó Losada la pasada semana durante la presentación de la Operación Especial de Tráfico 1º de agosto. Mayor número de agentes, radares fijos y móviles, cámaras de vigilancia del uso del cinturón y el móvil, vehículos camuflados y el helicóptero Pegasus. Todos estos elementos estarán presentes para tratar de ponerle freno a la mortalidad en los viales nacionales.

La DGT avisa de que las infracciones por exceso de velocidad pueden acarrear sanciones de 100 a 600 euros, la pérdida de entre dos y seis puntos en el carné de conducir y penas de prisión de tres a seis meses. Cincuenta kilómetros por hora es la velocidad aconsejada en las calzadas secundarias sin separación física de carriles para disminuir los impactos laterales, mientras que la recomendación alcanza los 70 km/h en los casos de choque frontal. En este sentido, la DGT redujo el pasado mes de enero a 90 km/h la velocidad genérica en este tipo de vías. Como muestra de preocupación, la Unión Europea dio un paso adelante al obligar a que todos los vehículos nuevos comercializados en Europa a partir de 2022 incorporen entre otros sistemas de ayuda a la conducción, el limitador inteligente de velocidad ISA que funciona conectado al GPS y dotado de una cámara que lee las señales viales y advierte al conductor cuando supera los límites legales.

Fin de semana trágico

Una decena de personas fallecieron en diez accidentes desde las 15.00 horas del viernes 9 de agosto a las 00.00 horas del domingo día 11, según datos actualizados pero aún provisionales de la DGT. De las diez víctimas mortales,víctimas mortales seis eran usuarios vulnerables„tres motoristas, dos ciclistas y un peatón„.

Por tipo de accidente, cinco de los siniestros fueron colisiones, dos salidas de la vía y un atropello a un peatón. Además, ocho de los accidentes se produjeron en vías convencionales y los dos restantes en autopista. Por jornadas, dos personas perdieron la vida el viernes en dos accidentes; el sábado fue el más trágico, con cinco muertos en cinco accidentes; y el domingo cerró con tres fallecidos.