La empresa pública de Servicios Gallegos (Seaga), encargada de asumir la retirada de los nidos de la avispa velutina en todo el territorio gallego, ha atendido más de un millar de incidentes en el primer mes en funcionamiento de este operativo.
El acuerdo con Seaga se enmarca en el plan de lucha contra esta especie acordado el pasado octubre entre la Xunta y la Federación Gallega de Municipios y Provincias (Fegamp), según informa la Consellería de Presidencia.
Desde la puesta en funcionamiento del operativo el 20 de enero hasta el pasado miércoles, 26 de febrero, el número total de avisos atendidos fue de 1.146, con unas 29 retiradas por jornada.
La cifra ha superado las 1.117 comunicaciones recibidas en los 38 primeros días desde el inicio del encargo porque también se han gestionado las 343 anteriores a esa fecha.
Dos tercios de las comunicaciones tramitadas se contabilizaron entre las provincias de A Coruña y Pontevedra, con 393 y 318 casos respectivamente, mientras que en la provincia de Ourense se atendieron 254 avisos y en la de Lugo los 181 restantes.
El equipo de Seaga cuenta con 80 profesionales, de los que 76 forman parte del equipo de intervención, distribuidos en los cinco centros de Santiago de Compostela, A Coruña, Lugo, Ourense y Pontevedra, mientras que los otros cuatro empleados son personal técnico y administrativo que integra el equipo de coordinación.
Los efectivos se encargan de la eliminación y retirada de nidos al amparo del plan de vigilancia y control de la Xunta y en colaboración con los 277 ayuntamientos adheridos la esta iniciativa, lo que supone nueve de cada diez municipios de la comunidad.
Una vez que se reciba el aviso en el teléfono habilitado en el 012, el personal de Seaga retira en un plazo medio de cinco días hábiles los nidos situados a menos de 25 metros de altura y en lugares accesibles en los que se pueda actuar con seguridad con los sistemas empleados de eliminación y neutralización.
Según puntualiza la Xunta, el tiempo de respuesta puede superar las cinco jornadas cuando los nidos sean inaccesibles, no haya consentimiento del propietario o no sea posible contactar con él, si están situados en vías de transporte o líneas eléctricas y cuando se precisen medios complementarios.
La Xunta y la Fegamp acordaron el pasado octubre poner en marcha de manera coordinada y conjunta este Plan, que cuenta con una dotación de 2,3 millones de euros, a través de fondos propios de la Administración autonómica y del Fondo de Cooperación Local.
