Ante el estallido del número de infectados en los centros de la tercera edad, la Xunta habilitó dos residencias para concentrar allí a las personas que dieran positivo en los asilos. Se abrió una en Santiago y otra en Baños de Molgas. Ahora, los dos centros se han quedado sin residentes contagiados y se están preparando para volver a la actividad ordinaria. En la imagen, dos militares desinfectan el centro de Santiago.