Tras quince días de campaña los candidatos a presidir la Xunta se bajaron por fin del coche con el que recorrieron Galicia pidiendo el voto y aprovecharon para recuperar el tiempo perdido con la familia, tomarse un aperitivo o incluso darse un chapuzón. Eso sí, todos insistieron en la jornada de reflexión en llamar a los ciudadanos a participar en los comicios.

El candidato popular, Alberto Núñez Feijóo,salió a pasear con su madre Sira por Vigo, a la que no ha visto mucho estos últimos meses. Primero por el confinamiento y después por la campaña. En su compañía se mostró confiado en que los gallegos no escuchen el "ruido" y vayan hoy a votar.

El socialista Gonzalo Caballero tuvo la misma idea que Feijóo y decidió ir a visitar a sus padres en su municipio natal (Ponteareas). Desde allí, pidió participación "máxima". "Así ganamos todos", señaló.

Además de pasear con su hija, la candidata del BNG, Ana Pontón, salió a tomarse algo en una terraza de Santiago con alguno de sus compañeros de partido y desde allí apeló a los "indecisos" a los que pidió que reflexionen "en qué país quieren vivir".

Para refrescarse tras la campaña electoral el candidato de Galicia en Común, Antón Gómez-Reino, se dio un chapuzón en A Coruña y después instó a los gallegos a que "expresen democráticamente su voluntad de hacer un país diferente".

El candidato de la Marea, Pancho Casal, en A Coruña y la de Ciudadanos, Beatriz Pino, en Vigo pasearon con sus perros y llamaron a la participación.