Es cada vez más frecuente encontrarse viviendas que se desmoronan por su antigüedad y vacías porque sus propietarios se resisten a venderlas o alquilarlas. "La desidia de las viviendas vacías en el perímetro rural de villas y ciudades ha llegado a este punto", lamentan desde el sector inmobiliario gallego.

Ante esta situación la patronal en la comunidad apela a la rehabilitación, tanto en el rural como en los cascos urbanos históricos. "De esta forma se contribuye a la sostenibilidad del entorno y a fijar de manera decidida y seria población en los ayuntamientos rurales, o en núcleos antiguos marginales, que están viendo como día a día pierden habitantes", destaca el presidente de Fegein, Benito Iglesias.

Pero para ello, según advierte, los ayuntamientos tienen que poner en práctica "medidas inteligentes" para aglutinar los servicios en núcleos donde exista una viabilidad notoria y evidente de asentamiento de población que perdure en el tiempo, dotando a estos núcleos de buenas comunicaciones y servicios, y que -añade- tendrá que ir acompañado de la creación de empleo. "No se fijará población, ni funcionarán las políticas de rehabilitación sino se crea empleo en ese entorno", concluye Iglesias.