La Dirección Xeral de Conservación da Natureza determinará el impacto del polígono de As Toxeiras. La Xunta explicó ayer que será este organismo autónomo el que emita el informe de evaluación ambiental del parque empresarial, que invade un Lugar de Interés Comunitario (LIC) incluido en la propuesta Rede Natura 2000, y cuatro hábitats inventariados, dos de ellos prioritarios. La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas incide en que será la Dirección Xeral da Natureza la que establezca los criterios "en relación con las lindes de este proyecto y la zona de ampliación de la Rede Natura".

La Xunta rehusó explicar los motivos que le impulsaron a incluir este polígono privado de 44 hectáreas en su plan de áreas empresariales pese a reconocer que el incremento de suelo industrial en esta zona no está debidamente justificado, "especialmente teniendo en cuenta que el polígono de Teixeiro que se encuentra a escasa distancia del ámbito está escasamente desarrollado, y que a poca distancia se encuentra también el parque empresarial de Guitiriz", como reconoce en el documento de referencia.

La ausencia de demanda industrial fue justamente uno de los motivos que esgrimió el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia para oponerse en 2010 a este desarrollo urbanístico (SUD-9). El Alto Tribunal rechazó los argumentos del Concello de Curtis, que apostaba por incluir este sector y otros cuatro más en el Plan General de Ordenación Municipal, y dio la razón a la Xunta del bipartito, contraria a "fragmentar el territorio con polígonos reducidos y dispersos".

Los magistrados concluyeron que los terrenos en litigio eran rústicos de especial protección agropecuaria. Los propietarios del 52% del sector, Galaico Mexicana Promociones y Elmac 2003 -que comparten sede en Vigo-, amenazaron con interponer una reclamación patrimonial de cuatro millones a Curtis por las pérdidas. Las empresas, que sostenían que los terrenos estaban "degradados", compraron el suelo cuando las normas subsidiarias lo calificaba como suelo urbanizable delimitado industrial.

El cambio en la calificación de industrial a rústica afectó también a otros tres sectores urbanísticos y al plan de sectorización impulsado por la empresa Feribeco que, al igual que el de Galaico Mexicana, fue anulado por el Gobierno gallego y posteriormente por la Justicia debido al cambio en la calificación del suelo de industrial a rústico. La Xunta, que tramita la autorización para el polígono de As Toxeiras, decretó el derribo de la nave de Feribeco, situada a escasa distancia y, denunció ayer el BNG, en una zona sin "ningún tipo de afectación ambiental".

Para posibilitar el desarrollo del polígono privado que ahora la Xunta incluye en su planificación industrial, Galaica Mexicana Promociones y Elmac 2003 adquirieron un terreno de 5.385 metros cuadrados en Aranga para, justifican, ejecutar un vial. Con la inclusión de esta pequeña porción de terreno en el municipio vecino, el proyecto adquiere la categoría de supramunicipal, por lo que puede obtener el permiso autonómico para la recalificación del suelo.

El Instituto Galego de Vivenda e Solo, órgano promotor de esta iniciativa privada, sostiene ahora que el desarrollo de esta área permitirá "satisfacer la demanda de suelo", "contribuir a la mejora de la ordenación territorial" y "buscar una solución" a "las empresas que lucharon por mantener la inversión inicial de tres millones".

Los propietarios de otros sectores que. al igual que el de As Toxeiras, fueron incorporados al plan general de Curtis y retirados por mandato autonómico, se sienten víctimas de un trato discriminatorio. Lo mismo denuncia el BNG. Su portavoz, Xosé Manuel Tomé, lamenta que el PP "avale un polígono que es pura especulación y ponga "obstáculos" a las empresas "que ya desarrollan su actividad y si crearon puestos de trabajo".

Incide en que la empresa compró los terrenos "antes de saberse nada del plan general". Estiman que la inversión que hizo Galaica Mexicana en la compra de terrenos fue de 50.000 euros. "Puso a la venta el polígono por 25,8 millones de euros y sin tocarle en nada. Lo que vendió fue la especulación", critica Tomé, que añade: "En Curtis lo que necesitamos son inversores, no especuladores".

Este periódico intentó ayer recabar la versión de la firma Galaica Mexicana. Un portavoz informó que el responsable no estaría disponible hasta dentro de "tres o cuatro meses".